
Las bromas entre la plantilla del FC Barcelona son una constante en las últimas temporadas. La última la han provocado dos de los jugadores más destacados del grupo, Lionel Messi y Gerard Piqué, que han querido tener un detalle con uno de los utilleros del equipo, causándole previamente un buen susto.
Los dos jugadores, cansados del ruido que producía el viejo ciclomotor del utillero, decidieron cortar por lo sano. Cogieron la moto, la introdujeron en un contáiner y le prendieron fuego.
No obstante, la intención de los dos futbolistas no era sino regalarle una moto nueva, acción que llevaron a cabo al día siguiente, según ha informado el programa 'Fora de Joc', de la radio catalana Ona FM.
El utillero se llevó una terrible sorpresa al ver su vehículo en llamas, pero el malestar desapareció al comprobar que la acción de sus compañeros se debía únicamente al deseo de renovar su modo de transporte habitual para cambiarlo por uno más moderno sin coste alguno para el empleado.