La amenaza de posible huelga para el tres de abril que tiene en vilo (y casi en Guerra Civil) al fútbol español podría delatar una humillación para alguno de los dos grandes, Real Madrid o FC Barcelona. De confirmarse el parón, el Clásico liguero se jugaría justo después de la final de Copa que ambos conjuntos disputan, esto es, el perdedor debería rendir tributo al ganador. ¿Se repetirá la escena de 2008 o habrá venganza a la inversa?
En aquella ocasión, el equipo de Schuster se proclamó campeón de Liga en Osasuna justo una jornada antes de que los dos equipos más laureados de España se vieran las caras en el feudo blanco con lo que, además de lograr el título, se hicieron con un trofeo menor: el eterno rival les haría pasillo en su propia casa.
En caso de no haber ganado el campeonato, el premio habría sido otro. Lograr la 31ª Liga contra el equipo de la Ciudad Condal.
Eto'o y Deco se borraron
No todos los jugadores del Barça rindieron tributo. Eto'o y Deco se borraron la jornada previa forzando tarjetas amarillas que les acarrearon sanción y que les permitieron no humillarse ante los blancos.
Otros, sin embargo, como Xavi, Valdés, Iniesta o Puyol se vieron forzados a tener que aplaudir a los merengues para regocijo de un Bernabéu más plagado de cámaras que nunca.
Aquello creo huella y en ocasiones posteriores, algunos de esos pesos pesados recuerda que en los Clásicos posteriores (2-6, 5-0...) seguía todavía presente en sus imágenes aquel recuerdo como una forma de motivación extra.
Pasillo blanco al Barça en el Bernabéu
Quizá la venganza definitiva pudiera llegar en sentido inverso. De haber huelga, y si el Barça ganase en Mestalla la Copa del Rey, tendrían que ser el Real Madrid el que le rindiese pasillo a los culé ante toda la afición madridista, algo similar a lo que ya ocurrió en 1988.
En aquella temporada, los blaugrana hicieron pasillo al Real Madrid tras ver como los de Benhacker ganaban su tercera liga consecutiva.
De producirse el movimiento tectónico en el calendario a causa de este posible paro patronal, el tema del pasillo no sería el único que afectaría direcamente a los duelos directos entre Real Madrid y Barça.
De llegar, podría provocar que en siete días se vieran las caras tres veces, esto es: 20 de abril (final de Copa), 23 de abril (duelo de vuelta liguero en el Bernabéu) y 26 o 27 de abril (ida de la Champions también en el Bernabéu).