LUXEMBURGO/LONDRES (Reuters) - Los aficionados al fútbol podrían ver partidos de fútbol en directo con tarjetas descodificadoras extranjeras, dijo el jueves una abogada de la UE, en una opinión legal que podría cambiar radicalmente el modo en el que se venden los derechos del fútbol.
La opinión de la letrada general Juliane Kokott, del Tribunal Europeo de Justicia, se centra en si los propietarios de los derechos, como la Premier League, pueden venderlos país por país, lo que les permite maximizar su valor.
Las cadenas británicas de televisión pagan unas tarifas mucho más altas por los derechos de la Premier que en otros países europeos.
Abogados dijeron que esta opinión pone el principio de un estado único por delante de la necesidad de los propietarios de los derechos de maximizar su valor y que si fuera aceptada por el tribunal supondría cambiar radicalmente el modo en el que se venden los derechos de televisión.
Los magistrados del Tribunal Europeo de Justicia, que se espera emitan su veredicto en unos meses, suelen seguir la opinión del letrado general en la mayoría de los casos.
"El acuerdo de exclusividad relacionado con la transmisión de partidos de futbol es contraria al derecho de la Unión Europea", dijo Kokott.
Este caso tiene lugar después de que varios pubs británicos hayan mostrado partidos en directo con tarjetas descodificadoras de una cadena extranjera para evitar pagar los elevados precios de los dueños oficiales de los derechos en Reino Unido, BSkyB y ESPN.
BSkyB y ESPN pagaron un total de 1.780 millones de libras por los derechos de televisión en Reino Unido durante tres años.
Si la opinión de Kokott fuera aceptada, la Premier League tendría que encontrar un modo de sortear la sentencia para evitar que sus socios se vieran duramente perjudicados.
Una opción sería ofrecer derechos paneuropeos, lo que favorecería a grandes empresas como News Corporation, ESPN, RTL y ProSiebenSat.1.
DECISION TRASCENDENTAL
El abogado especializado en competencia Becket McGrath dijo a Reuters que el anuncio es potencialmente trascendental.
"Todavía hay unos pasos que dar", indicó. "Pero potencialmente, cada dueño de pub en el país podrá pensar que para qué va a pagar varios miles a los dueños oficiales de los derechos cuando simplemente puede comprar una de estas tarjetas por el precio de una suscripción griega".
"Va a reventar el modo en el que se explotan los derechos de televisión. Es increíblemente significativo".
Otro potencial conflicto es que ahora los partidos no pueden darse en directo en Reino Unido un sábado a las 15:00 GMT, la hora tradicional del fútbol, porque la retransmisión de los encuentros más importantes podría desanimar a los aficionados de los equipos más pequeños a la hora de ir al estadio. La opinión de Kokott plantea si esta decisión ha tenido éxito y si hay que mantenerla.
En los últimos años, la Premier League se ha beneficiado de la enorme demanda por sus derechos y actuado contra varios infractores que han mostrado partidos en directo a través de descodificadores con tarjetas de cadenas extranjeras.
Pero Kokott afirmó que ese uso no socavaría los beneficios económicos de los dueños de los derechos.
"No hay (...) un derecho específico a cobrar precios distintos por un producto en cada estado miembro", argumentó.
Su opinión se refiere a dos casos: el de la dueña de un pub británico Karen Murphy, que compró un descodificador griego para mostrar los partidos de la Premier en la televisión de su bar, argumentando que la suscripción mensual a Sky Sports de BSkyB era demasiado cara.
Murphy fue demandada por una organización que representa los derechos de televisión de los clubes de la Premier, pero apeló al tribunal europeo tras perder su caso en una corte inglesa que le ordenó que pagara una multa.
El segundo caso se refiere a la organización de la Premier League contra dos proveedores de equipos de satélite extranjeros, después de haber llegado a un acuerdo con varios dueños de pubs que habían utilizado esos descodificadores para dar el fútbol.