Los fan de Quique insisten: hace milagros. A la espera de la Copa, a la espera de la Europa League, algunos ya le apuntan el primero para su beatificación atlética. Ha recuperado la mejor versión de Reyes. Lo que parecía imposible, ahora es rutina: El de Utrera ya recuerda al de Sevilla o el Arsenal.
El domingo, frente al Barcelona, fue el mejor de los suyos. Volvió a su esencia torera. Templó y capeó el fútbol como los buenos extremos. Eléctrico y maduro, hasta se atrevió a ejercer de mediapunta creativo.
Suyo fue el pase del gol a Forlán y suya la mejor ovación de la noche por parte de la misma grada que le creía perdido. Que le abucheaba a principio de temporada.
Recuperación a la vista
La mejoría venía de lejos. Poco a poco Quique le ha ido encauzando por el camino de la regularidad. Ese es su principal reto. Ser constante en el esfuerzo y el rendimiento. Calidad tiene y hasta le sobra. "Me cuesta la vida, pero merece la pena", comenta el preparador rojiblanco.
Ambos coincidieron el año pasado en el Benfica. Entonces dio algún atisbo de mejoría, pero en ningún caso como la actual. "En Lisboa me enfadó mucho. Es un jugador para marcar diferencias al máximo, pero no logré sacarle todo su rendimiento. Lo intenté de todas las maneras posibles, pero apenas conseguí el 70% del verdadero Reyes", comentaba en la zona mixta del Calderón.
El Mundial en su horizonte
Mientras tanto, él se siente querido y lo expresa de forma humilde: "Me voy contento porque el equipo ha ganado. Eso es lo más importante para todos. Con el equipo que tenemos, debemos mirar hacia arriba en la clasificación".
¿Es éste el mejor partido de Reyes? "No lo sé, lo que sí sé es que ha sido el mejor del Atlético de Madrid", comenta siguiendo la senda de no dejarse abrumar por los focos.
Tras ser el primer crack salido de la fábrica de Nervión (a él le siguieron Sergio Ramos, Capel o Navas entre otros), su paso inadaptado por Londres y el excesivo glamour madridista le hundieron. El Mundial de 2006 fue su último logro. Cuatro años después, sus íntimos afirman que él sueña con el retorno a 'la Roja'.
Para hacerlo deberá centrarse en el día a día. El Atlético le necesita y él necesita al Atlético. Y entre tanto, Quique musita el milagro lleno de sonrisas: "Lo hemos conseguido, lo hemos conseguido". Reyes ha vuelto y parece que no quiere marcharse.
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El Barça se hunde