Durante su reciente viaje a Sierra Leona, la actriz Salma Hayek encontró a un niño desnutrido cuya madre no tenía leche para darle. Salma no lo dudó y al tener muy reciente el nacimiento de su propio bebé, decidió amamantarle.
Desde que tuvo a su hija Valentina, Salma Hayek tiene el instinto maternal disparado. Acérrima defensora de la dar el pecho a los bebés, quiere que el tema deje de ser un tabú y que la gente aprecie sus ventajas. Ésto unido a sus ganas de ayudar a quien lo necesite, ha llevado a la actriz a vivir el tierno episodio.
Según declaraciones de la actriz al programa 'Today Show in America': "Se trata de que las mujeres tenemos que ayudarnos, y hay gente que precisa mucha más ayuda de la que te puedas imaginar. Hay que ayudar a los niños como podamos".
La mexicana siempre ha dado muestras de su enorme solidaridad, y visitó el desfavorecido país dentro campaña de UNICEF para la erradicación del tétanos."El bebé estaba perfectamente saludable -dijo Salma-, pero la mamá no tenía leche. Estaba muy hambriento. Yo había dejado de amamantar a Valentina, pero aún tenía mucha leche, así que alimenté al bebé. Deberías haber visto sus ojos. Cuando sintió el alimento dejó de llorar de inmediato".