
El presidente en funciones de Ucrania, Oleksander Turchinov, ha anunciado este domingo el inicio de una operación militar a gran escala en el este de Ucrania y ha dado de plazo hasta este lunes a las 8:00 horas a los simpatizantes prorrusos para que abandonen los edificios institucionales que tienen bajo su control y que depongan las armas.
En un mensaje televisado, Turchinov prometió que no se perseguirá a quienes entreguen las armas "y no hayan disparado" contra los efectivos de seguridad ucranianos que hoy iniciaron una operación antiterrorista en la ciudad de Slaviansk.
Un mensaje doble
Sin embargo, y para desactivar la tensión en el este del país por la vía política, el presidente también ha ofrecido la posibilidad de incrementar las competencias y la autonomía de estas regiones, afines a Moscú en su mayoría, así como "la renovación de los Gobiernos locales".
Turchinov, que ha descrito a los asaltantes como "tropas terroristas coordinadas por la Federación Rusa", ha prometido responder con contundencia al enfrentamiento de esta mañana en el que un militar ucraniano, identificado por el presidente como el coronel Gennady Bilichenko, ha fallecido y otros cinco han resultado heridos.
Rusia, acusada de manejar la sublevación
El Gobierno de Ucrania acusó hoy a los servicios de espionaje rusos de participar activamente en "la sublevación separatista" y la toma de edificios oficiales en ciudades del sureste del país.
"En las regiones orientales de Ucrania, lo servicios de espionaje rusos y saboteadores han iniciado una operación separatista a gran escala, con el objetivo de tomar el poder, desestabilizar la situación (...) y separar estas regiones de nuestro Estado", señala un comunicado del Ministerio de Exteriores de Ucrania.
La nota dice que, "con el fin de defender la vida de las personas, la integridad territorial y la seguridad del estado, el Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania tomó la decisión de llevar a cabo una operación antiterrorista contra este atentado contra nuestro Estado".
La Cancillería asegura que dispone de "pruebas concretas" de la participación de los servicios especiales rusos en los sucesos que tienen lugar en varias ciudades de las regiones orientales, donde manifestantes prorrusos se han hecho con distintas sedes oficiales y mantienen un pulso con Kiev.
El Ministerio afirma que presentará las pruebas a la comunidad internacional en la reunión a cuatro bandas prevista en Ginebra, el próximo día 17, con Rusia, EEUU y la Unión Europea.
Sospechas en la OTAN
Momentos antes también expresó sus sospechas sobre Rusia en el mismo sentido el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen: "La reaparición de hombres con armas especializadas rusas, vestidos con uniformes militares sin insignia que llevaban previamente las tropas rusas durante la ocupación ilegal e ilegítima de Crimea es un grave acontecimiento".
"Pido a Rusia que rebaje la tensión de la crisis y retire a su gran número de tropas, entre ellas fuerzas especiales, en los alrededores de la frontera de Ucrania", añadió.
El presidente Turchinov también ha hecho un llamamiento a la población del este del país para que "no se deje manipular" por quienes quieren empujar a Ucrania "a la guerra y al abismo del desastre económico", según la nota publicada en la página web oficial del Parlamento ucraniano.