Que el papa Francisco detenga el papamóvil para saludar a la gente ya es algo de todos los días. Pero que frene el vehículo para saludar a otro pontífice, no. Jorge Bergoglio fue sorprendido hoy, mientras se dirigía a dar su audiencia semanal, con la presencia de un niño que estaba vestido como 'mini-papa'.
El niño llevaba una réplica del traje del Papa: la sencilla sotana blanca, con su muceta (capa), la estola y solideo al tono. Se robó todas las sonrisas del Vaticano y se volvió la estrella del día.
Francisco no pudo evitar la expresión de alegría al verlo. Detuvo el papamóvil y tomó al niño en sus brazos durante el habitual paseo entre los fieles que realiza en la Plaza de San Pedro antes de comenzar la audiencia. Pero al crío la idea no le pareció tan buena y, aunque antes había estado jugueteando contento con su disfraz, se puso a llorar. El Papa lo besó y lo devolvió a su mamá.
Como es habitual durante el paseo, los gendarmes que rodean el papamóvil, le fueron acercando los niños y bebés para recibir la bendición y un gesto de cariño del pontífice argentino. Cuando vieron al simpático 'papa junior' no pudieron resistirse.
La original idea fue de Paola Ciabattini. El niño tiene 19 meses y se llama Daniele De Sanctis. "Vinimos a la audiencia antes de que terminara el carnaval porque queríamos mostrarle al Papa nuestro hijo y pedirle que lo tuviera en sus brazos para tener la bendición del papa original", dijo Ciabattini.
"La idea surgió durante Navidad. Se estaba lavando las manos y tenía una toalla y le pusimos la toalla en los hombros y mi suegra dijo: ¿Por qué no lo disfrazamos de Papa para el carnaval? Y así surgió la idea. Y su otra abuela le hizo el disfraz", contó la orgullosa madre. "Fue un gesto de amor para el Santo Padre", agregó. El carnaval y el ingenio parecen haber llegado al Vaticano.
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