
La Policía griega investiga el posible rapto de una niña de cuatro años hallada junto a familia gitana que no supo justificar su procedencia. La menor, rubia y de ojos azules, fue localizada en un asentamiento cerca de la ciudad de Farsala, en el centro del país.
Las fuerzas de seguridad sospecharon del origen de la niña porque no se parecía al hombre y la mujer que decían ser sus padres. La pareja, además, cambió de versión varias veces en los interrogatorios al explicar la procedencia de la menor y los análisis de ADN han confirmado que no guardan relación.
Un portavoz policial ha explicado que "la niña parece escandinava o podría ser búlgara". "Se trata de un caso de secuestro o de trata", ha advertido. La supuesta madre, de hecho, tenía documentos falsificados según los cuales había dado a luz a seis hijos en menos de diez meses.
La menor se encuentra ahora bajo custodia de una organización local y la fiscalía ha pedido que se publiquen fotografías para tratar de localizar a sus verdaderos padres.