
Gana la abstención, fracasa el Movimiento de Grillo. Así podría resumirse la jornada electoral que vivió Italia ayer, de la que se extrae una mensaje para el Gobierno de Enrico Letta: los ciudadanos han vuelto a desconfiar de la política y han decidido no acudir a las urnas. Los parlamentarios de Grillo le desobedecen al pedir cobrar los complementos
Los datos difundidos por el Ministerio de Interior de Roma revelan una afluencia a las urnas del 62%, es decir más del 10% menos que la vez anterior. Aún más bajo el numero de electores en la capital italiana, donde sólo ha votado la mitad de los romanos.
Pero si la cita electoral, que incumbía a más de 500 ayuntamientos en todo el país, vuelve a poner la atención en el recelo de los italianos hacia la política a tres meses de las elecciones generales, sorprende el rotundo fracaso del Movimiento 5 Estrellas (M5S): la formación política liderada por el cómico Beppe Grillo ha quedado esta vez muy lejos del 25% que había alcanzado en los últimos comicios nacionales y no ha conseguido ningún alcalde. En Roma, donde en febrero el M5S había superado el 27%, su candidato sólo alcanza un mísero 12,5%.
Del otro lado, el centroizquierda, al cierre de esta edición, confirma su tradicional fuerza en las elecciones municipales asegurándose la alcaldía en más de 30 capitales provinciales, mientras la derecha sólo gana en una decena. Los demás van a la segunda vuelta. A falta de dos semanas para la segunda vuelta (que en capitales como Roma decidirá el ganador), el panorama no es tan preocupante para los grandes partidos que soportan al Gobierno de amplia coalición de Enrico Letta. De hecho, mientras el Partido Demócrata y el Pueblo de la Libertad se enfrentan en la capital (donde la izquierda, con Ignazio Marino, lleva unos puntos de ventaja sobre el alcalde saliente Gianni Alemanno) Grillo pierde terreno, a pesar de ser, junto con Sinistra Ecologia y Libertad (equivalente de la Izquierda Unida española), la única oposición parlamentaria al Ejecutivo.
Y es que la falta de experiencia y un discurso centrado sólo en los privilegios de la política (sin ninguna propuesta para salir de la crisis) han pasado factura al Movimiento 5 Estrellas. Lo que podría reforzar al Gabinete de Letta: según los últimos sondeos difundidos por los medios transalpinos, el presidente del Gobierno goza de una popularidad del 45 por ciento, no mayoritaria pero superior a la de los principales líderes políticos transalpinos. Un resultado que podría mejorar si el Ejecutivo consigue sacar adelante los estímulos al crecimiento que el primer ministro ha anunciado.