
El Vaticano acusó el sábado a los medios de comunicación italianos de difundir informaciones "falsas e hirientes" en lo que condenó como un intento deplorable de influir en los cardenales que se reunirán en un cónclave secreto el mes que viene para elegir a un nuevo Papa.
Desde que Benedicto XVI anunció su dimisión el 11 de febrero, los diarios italianos han estado llenos de rumores sobre conspiraciones, informes secretos y 'lobbies' en el Vaticano que según ellos presionaron al Papa para abdicar.
"Es deplorable que, a medida que nos acercamos al momento del comienzo del cónclave haya una distribución generalizada de noticias a menudo sin verificar, sin confirmar o completamente falsas que causan un daño importante a las personas y a las instituciones", dijo un comunicado de El Vaticano.
Imagen perjudicial
Las informaciones han mostrado una imagen poco favorecedora de la administración central del Vaticano, conocida como la Curia, y la han descrito como repleta de prelados más preocupados por sus carreras que por servir a la Iglesia o al Papa.
Algunos responsables de la Iglesia, hablando en privado, han dicho que los cardenales extranjeros que viajarán a Roma para elegir al nuevo Papa se han visto alarmados por las informaciones sobre corrupción y podrían verse inclinados a elegir a alguien sin relación con la Curia, que es predominantemente italiana.
El comunicado del Vaticano dijo que las informaciones de medios italianos eran un intento por influir en el resultado del cónclave a través de una opinión pública negativa como los estados y los reyes trataban de influir en las elecciones papales hace siglos.
El Papa ha anunciado que renunciará el 28 de febrero, convirtiéndose en el primer pontífice en abdicar en unos seis siglos.
Benedicto XVI, de 85 años, dijo que su salud ya no le permitía gobernar la iglesia católica de 1.200 millones de fieles como le gustaría.