Europa

La vigilancia de Assange le cuesta a Reino Unido 13.000 euros diarios

Julian Assange, en su comparecencia desde el balcón de la Embajada de Ecuador en Londres.

Cerca de cumplir los 100 días de reclusión forzosa en la Embajada de Ecuador, el ciberactivista más popular del mundo, Julian Assange, comienza a acuciar el cansancio.

Según relata el diario ABC, que cita a diarios británicos, Julian Assange, epicentro de un conflicto diplomático-judicial en el que tres países se han visto implicados -Ecuador, Reino Unido y Suecia, que pide su extradición para juzgarle por delitos sexuales-, comienza a aburrirse de su encierro entre las cuatro paredes de la habitación que la Embajada de Ecuador en Londres ha puesto a su disposición.

Assange dice trabajar 17 horas al día, y, si bien es cierto que los dos primeros meses no paraba de recibir visitas y de estar en el centro del huracán, la normalización de un escenario tan opuesto a la normalidad está minando sus ánimos.

El conflicto no es baladí, sobre todo para el contribuyente británico. La vigilancia 24 horas de la Policía de Reino Unido alrededor de la Embajada ecuatoriana en Londres, para impedir cualquier fuga de Assange, le cuesta al Gobierno 13.000 euros diarios.

Mientras tanto, Assange se ha adaptado a las costumbres ecuatorianas de la legación diplomática -le gusta comer ceviche y viste camisas al estilo del país latino- y aún puede recibir alguna visita impactante.

La última ha sido la de la cantante neoyorkina Lady Gaga, que se interesó por él tras un concierto en Londres, a recomendación de otra diva del electropop, la cantante M.I.A.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky