Unas 500 personas participaron este sábado en Vilna en la primera marcha del orgullo gay que se celebra en la capital lituana a pesar de las fuertes medidas de seguridad y la contramanifestación de unas 1.000 personas contrarias a este acto. Unos 600 policías equipados con material antidisturbios, caballos y perros fueron desplegados en un principios para evitar incidentes.
La marcha del orgullo transcurrió sin incidentes, pero la policía tuvo que utilizar gas lacrimógeno para dispersar a los contramanifestantes cuando éstos intentaron reventar el acto. Hasta 19 personas fueron arrestadas.
"Hoy marchamos por la libertad. Hoy marchamos por la igualdad. Hoy marchamos por Europa (...). Nunca aceptaremos que la homofobia se apodere de nuestras calles", afirmó la ministra para Asuntos Europeos sueca, Birgitta Ohlsson, durante el acto, en el que también participaron los embajadores de Francia y Reino Unido y cinco eurodiputados. Sólo participaron dos diputados lituanos.