California dio la espalda al casamiento homosexual aprobado en mayo de este año por la Corte Suprema estatal al votar una enmienda constitucional que valida "sólo el matrimonio entre un hombre y una mujer" y deja en el limbo a miles de parejas del mismo sexo ya casadas.
La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) en San Francisco, presentó ante la Corte Surprema de Justicia con sede en esa ciudad del norte de California (oeste), una petición por escrito "exhortándola a invalidar la Proposición 8 si es aprobada", dijo en un comunicado apoyado por el centro Nacional de Derechos de las Lesbianas y el grupo Lambda Legal.
Con 99,5% de los sufragios escrutados, la Proposición 8 que invitó a votar "Sí" a la enmienda para prohibir los matrimonios homosexuales en California obtuvo 52,5% del voto popular contra 47,5% del "No", según la Secretaría de Estado local.
En respuesta a ese resultado, el registro civil del Condado de Los Angeles suspendió la entrega de licencias matrimoniales a parejas del mismo sexo, apegándose a la regla de que los cambios constitucionales aprobados en las urnas toman efecto al día siguiente de la votación.
Los "defensores de Igualdad para todos y miembros del 'No' a la Proposición 8" del bastión de la comunidad gay en Los Angeles, West Hollywood, invitaron a una concentración el miércoles en la noche pero se cuidaron de no conceder ninguna frase que diera por admitida la victoria del grupo del "Sí" a la prohibición.
Contactados por la AFP ninguno de los portavoces de los grupos activistas por la comunidad gay, lesbiana, bisexual y transexual (LGBT, como se denominan en inglés) quiso pronunciarse sobre el resultado del referendum del martes.
"Esto realmente duele. No trataría así ni a un perro", dijo el miércoles Robin Tyler en una rueda de prensa junto a su esposa Diane Olson, la pareja de lesbianas que apenas en junio de este año se convirtieron en el primer matrominio gay de Los Angeles y que ahora anunciaron que darán la pelea legal.
La medida, que se convirtió en la manzana de la discordia en este Estado que votó por rotunda mayoría al presidente electo demócrata Barack Obama, dejaría en el limbo legal las uniones de unas 18.000 parejas del mismo sexo que se casaron durante los cuatro meses y medio que estuvo en vigencia el derecho.
En California se registraron para votar más de 17 millones de personas, de los 37 millones de habitantes, donde 61,3% votó por el presidente electo, el demócrata Barack Obama, contra 36,9% que optó por su rival republicano John McCain.
Pero el triunfo presidencial fue agridulce al conocerse este revés a un derecho ganado recién en mayo para la comunidad homosexual y que había sido celebrado con bombos y platillos y miles de bodas gay, entre ellas la de la comediante Ellen DeGeneres con la actriz Portia de Rossi y la del actor de "Viaje a las Estrellas" George Takei, que se casó con su compañero Brad Altman.
En un estado donde más del 30% de la población es de origen hispano las campañas por el "Sí" a la "Proposición 8" y la del "No" gastaron 74 millones de dólares, aunque fueron las iglesias como la mormona las que aportaron hasta 10 millones de dólares para que la gente votara a favor de la prohibición.
Las campañas de los grupos conservadores apuntaron a los latinos desde agosto, con numerosos avisos en radio y televisión que alertaron sobre el peligro de la enseñanza del matrimonio homosexual en las escuelas públicas, un aspecto relevante para los hispanos que marcaron su peso en el 61% que votó contra los casamientos gay en 2000.
El cardenal del arzobispado de la Iglesia Católica de Los Angeles, Roger Mahony, dijo el miércoles que la aprobación de la Proposición 8 "fue el resultado de una coalición sin precedentes de muchas comunidades de la fe y otros ciudadanos que entendieron la importancia de mantener la institución del matrimonio".
California era uno de los tres estados después de Massachusetts y Connecticut (este) -que lo aprobó en octubre- donde se permitía el matrimonio homosexual en Estados Unidos. El martes, dos propuestas similares para prohibir las uniones homosexuales ganaron fácilmente en Arizona (suroeste) y Florida (sureste).