
El Catedrático de Estructura Económica de la Universidad Ramón Llull, Santiago Niño Becerra, asegura que España cumple con sus obligaciones y que gracias a ese compromiso con sus acreedores los bancos compran deuda pública sin exigir grandes rentabilidades.
El economista catalán explica en su cuenta de Twitter que, en un principio, desde el Ministerio de Haciendo se aseguró que el rescate a la banca no iba a costar ni un céntimo a los españoles, pero "como el argumento ya no se sostiene, se cambia".
Apunta Niño Becerra que, según explica ahora el Gobierno, "el rescate bancario ha costado dinero, sí, vale, pero gracias a eso España se ha salvado, porque le compran la deuda y paga poco por ella".
Becerra, sin embargo, discrepa de esa opinión y cree que fue la reforma constitucional de 2011, que introdujo el concepto de estabilidad presupuestaria en el artículo 135 el que salvó el país: "Si España no hubiese insertado en su Constitución el artículo 135, ese que dice que antes se cerrarán colegios y hospitales que dejar de pagar la deuda; si España no pagase puntualísimamente los intereses de su deuda, ¿quién iba a comprar la deuda y por qué el precio de esa deuda hubiera bajado?", se pregunta el Catedrático.
El economista asegura que "en el mundo sobra dinero, pero además se exige rentabilidad y seguridad, y España hoy cumple, a pesar de que las regiones tengan que elaborar 255 propuestas para reducir gastos ya que los ingresos fiscales no llegan".
Para Niño Becerra ahí está el truco, España cumple y pagar la deuda se ha convertido en la prioridad, "ahí está el truco, no en las ayudas a la banca".
De todos modos, Becerra cree que lo mejor hubiera sido intentar explicar la verdad en lugar de contar que el rescate a la banca no iba a costar ni un céntimo a los españoles: "por definición ningún banco podía quebrar y el mecanismo de liquidación ordenada de bancos no había sido aprobado aún por el Eurogrupo ¿Por qué no intentaron explicar la verdad?", se pregunta Becerra.