El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, defendió ayer públicamente el recurso de la Fiscalía contra el auto de prisión al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, dictado por el titular del Juzgado de Instrucción de Madrid número 9, Elpidio José Silva. La Fiscalía recurre la prisión de Blesa porque "no hay riesgo de fuga".
Gallardón insistió en negar que estuviese atentando contra la separación de poderes, que exige el respeto de los miembros del poder ejecutivo a la actuación judicial en la democracia, y consideró ayer una "garantía" que sea un "órgano colegiado" como la Audiencia de Madrid quien adopte la decisión final.
A este respecto, señaló en declaraciones a la prensa, tras participar en la reunión de ministros de Justicia de la Unión Europea, que "hay que respetar siempre las resoluciones judiciales, pero hay que recordar que vivimos en un Estado de Derecho y en un Estado de Derecho como España cualquier tipo de resolución judicial que afecte a derechos fundamentales, como es este caso, es susceptible directamente de recurso".
El ministro mostró su satisfacción ante una posible retirada del caso al juez Silva al señalar que "no será un órgano unipersonal, como ha sido en este caso, sino un colegio, un órgano colegiado de jueces, quien decida si estas conductas son o no merecedoras de una situación privativa de libertad".
Finalmente, Gallardón eludió pronunciarse sobre la posibilidad de que la Fiscalía investigue la actuación del juez Silva y apuntó que "es una decisión que no corresponde adoptar al poder político que representa el Ministerio de Justicia sino, dentro de su autonomía y siempre de acuerdo con el principio de legalidad, a la propia Fiscalía".
Retirar la prueba de los 'email'
La Fiscalía de Madrid no comparte la actuación que el juez tiene con Miguel Blesa. El 16 de mayo, la primera vez que el magistrado decidió el ingreso en prisión con fianza del expresidente de Caja Madrid, ya rechazó tal decisión.
El Ministerio Público no ha empleado el recurso de reforma, que es optativo y que debe ser resuelto por el propio juez de instrucción en el plazo de tres días.
De esta forma, con la intención de agilizar la resolución del encarcelamiento del expresidente de Caja Madrid, la Fiscalía se ha dirigido directamente a la Audiencia de Madrid para aducir a los magistrados de la Sala de lo Penal, que no aprecian que exista ningún riesgo de fuga del expresidente de Caja Madrid. Los argumentos de la Fiscalía se basan en que ha comparecido a todos los llamamientos judiciales, que ya tiene depositada una alta fianza y que tiene un gran enraizamiento social.
Fuentes jurídicas próximas al juez Silva manifestaron a elEconomista que las denuncias de la Fiscalía se centran en el empleo de los correos de Blesa , argumentando que podrían vulnerar su intimidad, aunque se trata de correos institucionales.
Este argumento ha sido uno de los planteados por el abogado de la defensa de Blesa , Carlos Aguilar, en su escrito de recusación al juez por el sumario del crédito a Díaz Ferrán. Por su parte, el juez Silva, en su auto, señalaba que se trata de correos electrónicos institucionales y que estuvo en la mano del propio Blesa como presidente de Caja Madrid haber puesto en marcha los protocolos oportunos para haber separado los correos de la empresa de los públicos.
En su auto de 27 de mayo de 2013, el juez Silva explicaba que "es reprochable al propio imputado Miguel Blesa la inexistencia de órdenes, instrucciones, protocolos o códigos de buenas prácticas, de manera que la empresa no quedase privada de sus poderes directivos, ni condenada a permitir cualesquiera usos de los instrumentos informáticos sin capacidad alguna de control sobre la utilización efectivamente realizada por el empleado".
Nuevas presiones
Paralelamente con esta actuación, el fiscal jefe de Madrid, Manuel Moix, volvía ayer a presionar al juez con el anuncio de que estaría estudiando "muy seriamente interponerle una querella por prevaricación continuada", según reveló a El País.
El fiscal añadía que, se haga lo que se haga, "hay que hacerlo bien, y ajustado al Derecho, para evitar futuros problemas de nulidad de actuaciones".
Posteriormente, Moix intervino en Hora 14 de la Cadena Ser para calificar de forma "insólita" la actuación del juez.
Sobre el auto de prisión cree que al juzgarse hechos de los años 2008 y 2009 las "medidas restrictivas de derechos fundamentales tienen que estar muy bien fundamentadas y ser proporcionales. La Fiscalía considera que en este caso no se da", por eso habla de la posibilidad de que se declare nulo el proceso. "Si las actuaciones del juez afectan a los derechos fundamentales del procesado, podrían tener un efecto bumerán", afirma el fiscal.
Moix aseguró también que será difícil establecer si los movimientos de Blesa "son constitutivos de delito si las conductas del juez están viciadas".
Por su parte , el juez Silva, según las fuentes jurídicas consultadas por elEconomista, desde el auto de apertura, considera que los casos están debidamente fundados en circunstancias notorias que se describen, con detenimiento, en el auto del 9 de enero de 2013, que resuelve el recurso de reforma contra el auto de reapertura de las actuales diligencias y en el que decreta la prisión sin fianza de Blesa .
También, entiende que la denuncia de Manos Limpias no sólo tiene fundamento en actos notorios, sino que la actuación de Blesa se constata en la actual situación económica de Bankia, como heredera directa del colapso producido en Caja Madrid.
Por ello, considera necesario investigar estas actuaciones, que no son fáciles de detectar a primera vista, porque se realizaron en la oscuridad de comités y están esparcidas por múltiples informes y trámites.
Considera también que las pruebas adoptadas operan ante títulos imputatorios concretos, sin que socaven el derecho de defensa.
Finalmente, considera que estaba en la mano de Blesa , como presidente de Caja Madrid, haber establecido los protocolos adecuados para separar los emails oficiales de los privados.
Queja del juez contra el fiscal
Fuentes jurídicas cercanas al juez Silva anunciaron que el propio magistrado está estudiando la presentación de una queja contra la actuación del nuevo fiscal del caso, que hasta el momento ha demostrado no haberlo estudiado y tratar de infundir con sus preguntas que no existió mala fe en las presuntas actuaciones irregulares realizadas en la gestión de Caja Madrid. Estas mismas fuentes jurídicas revelaron a elEconomista que, a pesar de las manifestaciones realizadas por el abogado de Miguel Blesa , Carlos Aguilar, en el Juzgado nº 9 de Instrucción de Madrid no había entrado, al menos hasta última hora de la tarde de ayer, ningún escrito de recusación del juez Silva sobre el sumario por las presuntas irregularidades en la compra del City National Bank of Florida.
Fuentes del propio Juzgado de Instrucción nº 9 reconocieron ayer esta misma circunstancia y han explicado que el propio fiscal de la causa tuvo que dar la razón al juez cuando pretendió cambiar la recusación del caso del préstamo a Díaz Ferrán (58/2010) al de la compra del banco.
Estas mismas fuentes señalaron a elEconomista que el perito de la firma KPMG que ha actuado en el sumario del crédito a Díaz Ferrán ha manifestado su deseo de no realizar estas labores en el sumario de la adquisición de la entidad financiera tras las numerosas presiones que ha venido sufriendo.