El presidente de la Comisión de Presupuestos del Congreso y exvicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, ha rechazado este miércoles la reforma que permitirá la inhabilitación cautelar de los políticos imputados en casos de corrupción porque, a su juicio, no se puede imponer una pena antes de enjuiciar. "Eso no cabe en la legislación española", ha dicho. Alfonso Guerra no cree capaz a "la élite política" de reformar la Constitución.
Guerra se ha manifestado en estos términos en declaraciones a los periodistas en los pasillos de la Cámara Baja al ser preguntado por la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que promueve el Ministerio de Justicia.
El histórico dirigente socialista ha admitido no ser un "experto" en la materia, pero ha recalcado que la inhabilitación supone ya de por sí una pena, por lo que "si no hay todavía un procesamiento, un juicio y una condena, será muy difícil que pueda establecerse una de las penas antes de enjuiciar".
"Creo que no tiene base jurídica", ha apostillado Guerra, quien ha insistido en que la inhabilitación cautelar de los cargos políticos que se baraja aplicar no supone una medida cautelar, como puede ser retirar un pasaporte. "Esto es condenar y creo que no cabe", ha concluido.
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