La Policía Nacional estrena campaña para luchar contra el vandalismo. Difundido a través de redes sociales, el vídeo creado para concienciar a los ciudadanos a ayudarles a "luchar" contra este problema repasa los daños y el coste de los mismos tras los disturbios.
Así, muestran que, por ejemplo, un contenedor quemado supone un gasto de 900 euros o que una marquesina rota supone 10.000 euros de reparación, entre otros datos.
Con imágenes de fondo de altercados en los que encapuchados destrozan mobiliario urbano a base de pintadas o con fuego, la Policía transmite un mensaje: "Los destrozos de unos pocos los pagamos todos".
Para hacer efectiva la ayuda, el vídeo refleja una dirección de correo electrónico a la que los ciudadanos pueden escribir para denunciar.