Las Fuerzas Armadas de Venezuela completan este miércoles la movilización de 10 batallones y equipos de tierra, aire y mar hacia la frontera con Colombia, para reforzar las unidades que normalmente operan en la zona, con ánimo defensivo, anunció el alto mando militar.
"La ejecución de la operación hacia la frontera occidental (con Colombia) está en plena marcha", por tierra, aire y mar, señaló el ministro de la Defensa, general Gustavo Rangel, en conferencia de prensa.
"Aproximadamente entre 85% y 90% de efectivos (de los 10 batallones) están emplazados donde debían estar. Esperamos hoy (miércoles) tener el 100% de los efectivos allá", añadió el general José Gregorio González.
Los jefes militares declinaron precisar la magnitud de la movilización por aire, mar y tierra, que incluye el desplazamiento de unidades blindadas, y se limitaron a repetir la orden pública del presidente venezolano, Hugo Chávez: "movilizar 10 batallones", sin precisar.
El ex ministro de la Defensa Raúl Salazar, que trabajó para Chávez en su primer mandato, dijo a AFP: "Diez batallones equivalen a dos brigadas, que serían unos 6.000 hombres. Pero no se sabe la verdadera cantidad porque no se conoce la naturaleza de esas unidades, si son blindados, artilleros, de infantería o tropas de apoyo".
Las frontera con Colombia no será cerrada, enfatizaron los jefes castrenses.
El general González explicó a periodistas: "Este personal de tropa va a cumplir las labores regulares que se cumplen en la región, sabemos que tenemos problemas de contrabando. Van a reforzar, no van a estar resguardados en un cuartel". "Ahora vamos a fortalecer algunas debilidades que teníamos en esa región", apuntó.
La movilización ocurre en medio de una crisis diplomática entre Caracas, Quito y Bogotá, después de que Colombia realizó el fin de semana una operación en la zona fronteriza con Ecuador penetrando en territorio ecuatoriano, donde dio muerte al número dos de la guerrilla de las FARC, Raúl Reyes.
La crisis está siendo abordada en el marco de la Organización de Estados Americanos (OEA), que el martes celebró su primera reunión en Washington.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, planea llegar a Caracas este miércoles para abordar la crisis con Chávez, tras una gira que realiza por la región.
Chávez tomó la decisión de movilizar las tropas "frente a las amenazas que pesan sobre nuestra patria, luego de la agresión al territorio de la república del Ecuador ejecutada por fuerzas militares del Estado Colombiano", dijo Rangel.
Las operaciones colombianas fueron "dirigidas por agentes del imperio estadounidense, aduciendo razones que bien pudieran ser esgrimidas como válidas para un similar comportamiento contra la soberanía de nuestro país", denunció.
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, aseguró el martes que un comandante de las FARC, Iván Márquez, tendría un campamento en territorio venezolano. Ni Rangel ni González respondieron sobre la veracidad de esa versión, pese a que la pregunta les fue planteada en la rueda de prensa.
El ministro de Defensa dijo que Colombia actuó "siguiendo doctrinas de marcado corte imperialista, como la guerra preventiva y el uso del campo de batalla tridimensional".
"Es la manifestación irracional de un gobierno (Colombia) cuyo objetivo es defender los intereses de una potencia extranjera, realizando en síntesis un claro acto de guerra", puntualizó.
Por su parte, el ejército de Ecuador desplazó este miércoles más refuerzos a la frontera amazónica con Colombia, donde operan equipos de combate especialistas en selva.
Alrededor de 160 soldados Iwia (palabra indígena shuar que significa demonio), divididos en cuatro equipos, incrementaron el patrullaje en la región de Sucumbíos, que limita con el cocalero y convulso departamento colombiano de Putumayo, con gran influencia guerrillera, constató AFP.
Provistos de fusiles y ametralladoras HK de fabricación alemana y lanzagranadas RPG-7 rusos, los militares partieron en camiones todoterreno desde la base del Grupo de Fuerzas Especiales Rayo 24 del Ejército, acantonado en Lago Agrio, capital de Sucumbíos y núcleo petrolero de Ecuador.
"Estamos patrullando con la consigna de evitar infiltraciones de fuerzas regulares o irregulares", dijo a AFP el jefe de uno de los equipos Iwia durante una inspección en un área limítrofe de Sucumbíos.
Personal de un batallón de la selva también se incorporó al refuerzo, sin que las autoridades precisaran la cifra de soldados que se ha sumado a la frontera desde que el presidente Correa ordenó la movilización de tropas por la incursión colombiana.
Antes de que estallara el conflicto, que derivó en la ruptura de relaciones de Quito con Bogotá, Ecuador mantenía unos 11.000 uniformados en la frontera, de los cuales concentró el lunes a 3.200 en Sucumbíos, escenario del bombardeo contra el campamento de las FARC.