La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, tachó este jueves de "falsedad como un templo" que el aborto sea considerado un derecho. Pero se aleja de extremismos y se une a la postura de Gallardón asumiendo como necesaria una reforma de la ley en esa materia.
Es "un fracaso, pero de ahí a meter en la cárcel" a quien aborta, "no, pero sí creo que hay que cambiar la ley y en eso estoy de acuerdo con Gallardón". De este modo, Aguirre participó hoy de la polémica generada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, tras afirmar que existe una "violencia estructural" que conduce a algunas mujeres a interrumpir su embarazo.
Para la presidenta madrileña, la reforma de la ley del aborto que aprobó el Ejecutivo Zapatero "no me convence nada" y manifestó su esperanza en que el Gobierno de Mariano Rajoy reformará la ley de modo que para los tres supuestos se establecerán nuevos plazos que impidan caso de "abortos con ocho meses, que son un asesinato".