
El considerado presunto cabecilla de la trama Gürtel Pablo Crespo ha confirmado ante el jurado, tras romper su silencio inicial, la conversación que le fue intervenida en la cárcel de Soto del Real -y por la que hay un procedimiento abierto en el Tribunal Supremo contra el juez Baltasar Garzón- en la que le aseguraba a su abogado que al expresidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, no se le había pagado ningún traje.
Crespo se ha pronunciado de esta manera en respuesta a algunas de las preguntas que le ha formulado el letrado de Camps, Javier Boix, durante el juicio que se celebra en el Palacio de Justicia de Valencia contra el expresidente y el exsecretario general del PPCV y diputado en las Corts, Ricardo Costa, por un presunto delito de cohecho pasivo impropio.
Pablo Crespo se ha acogido a su derecho a no declarar a las preguntas formuladas por las acusaciones -ministerio público y el letrado del PSPV- pero cuando ha llegado el turno del abogado de Camps, ha indicado que iba a responder a algunas de las preguntas de las que se acordaba y ha ratificado su declaración ante el juzgado de Colmenar Viejo en la que afirmaba que los dos acusados en esta causa se pagaron sus trajes.
Asimismo, ha confirmado la conversación que le fue intervenida cuando estaba en prisión, en la que indicaba a su letrado que tenía la "convicción firme" de que a Camps "no le habíamos pagado ningún traje", ha reproducido. También ha negado que alguien le haya hecho una oferta para modificar su situación procesal a cambio de cambiar su declaración sobre el expresidente, y ha dicho que si se le hubiera regalado un traje, lo sabría. Junto a ello ha negado que la empresa Orange Market haya pagado alguna prenda a Ricardo Costa.
Cambio de opinión de una ex empleada
Isabel Jordán, exadministradora de diferentes empresas del grupo Correa, ha achacado hoy a los nervios la frase de una conversación grabada en la que dijo que su sociedad había pagado 30.000 euros a la tienda Milano "para pagar los trajes de Camps", ya que no sabe si es cierto.
Jordán, que se encuentra bajo protección policial tras las denuncias que interpuso contra Francisco Correa y Pablo Crespo -supuestos cabecillas de la trama Gürtel, que están citados a declarar esta tarde en el Palacio de Justicia de Valencia-, trabajó para diferentes empresas de la trama, que contó con una red de al menos siete sociedades con los mismos empleados.
En 2007 despidieron a uno de los contables, Javier Nombela, que también era asesor del PP en Madrid, y éste, en agradecimiento, le entregó un disco duro y un gran volumen de información que entregó a un notario por si en algún momento era requerida por el juez.
Abandonó el grupo de Correa
Entre esa información encontró numerosos asuntos que desconocía y por ello decidió abandonar el grupo Correa y denunciar a sus responsables por administración irregular, manipulación de archivos y amenazas, según ha contado la testigo, cuya declaración no ha podido ser grabada por las cámaras por su condición de protegida.
Entre otros asuntos, Nombela le comentó que había una factura pendiente de Orange Market con Forever Young de unos 30.000 euros, que según dijo "eran para pagar los trajes de Camps".
Jordán, que asegura que estaba muy enfadada porque no había dinero en su empresa -en ese momento esta adscrita a Easy Concept- para pagar las nóminas, reprodujo este mismo argumento en una conversación con José Luis Peñas, concejal entonces de Majadahonda (Madrid), y con un asesor laboralista, la cual fue grabada por la Policía, y en la que confundió la tienda Milano con la de Forever Young.
La frase
Concretamente, según ha podido escuchar el jurado, dijo: "Hemos pagado incluso 30.000 euros a una tienda llamada Milano para pagar los trajes de Camps".
Jordán ha admitido hoy que no sabía a qué correspondía el citado documento que reflejaba la citada deuda de Orange Market con Forever Young, que exactamente ascendía a 30.638 euros, y tampoco cree que fuera "cierto" que se debiera a los trajes de Camps.
La testigo protegida, no obstante, ha reconocido que pagó con la tarjeta de su empresa diferentes prendas en esta tienda para un alcalde de la Comunidad de Madrid por un importe de 2.400 euros.
También ha reconocido que en la información que le dio el contable hay otros artículos adquiridos en Forever Young, aunque ninguno de ellos era para sus empresas.
Las empresas de la trama, según ha dicho, solían hacer regalos a alcaldes y concejales en fiestas señaladas o por determinadas celebraciones.
Según ha contado, a Francisco Camps únicamente lo conoce por las noticias que aparecen de él en la prensa, mientras que con Ricardo Costa coincidió en 2007 durante el Open de Tenis de Valencia y en el expositor de la Comunitat Valenciana instalado en la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur), cuyas infraestructuras fueron adjudicadas por la Generalitat a Orange Market durante varias ediciones.