El tema de los trajes de Camps y su vinculación con el caso Gürtel sigue levantando ampollas dentro del PP valenciano. Cada vez más son las voces discrepantes con el hecho de que Francisco Camps sea el candidato del partido a la presidencia de la Comunidad Valenciana.
A la espera de que lo que decida mañana el Tribunal Superior de Justicia de Valencia de si alarga o no el proceso abierto contra Camps, el número de dirigentes del PP valenciano en discordancia con la política del actual presidente crece con el paso de los días.
Son muchos los que están cada vez más hartos de que su siglas políticas solo se asocien con corrupción. Al asunto de los trajes de Camps con la red Gürtel hay que sumarle el 'caso Brugal' y las causas contra José Joaquín Ripoll en la provincia de Alicante, todas ellas en la comunidad presidida por él.
¿Qué necesidad hay de mantener a Camps?
A pesar de la imagen de unidad y el esfuerzo de Genova por mostrar una cohesión entorno a su líder, la realidad viene a ser algo distinta. "Esto se va a llevar por delante a Francisco Camps y su Ejecutiva", señala un miembro del PP de esta Comunidad en una declaraciones en El Confidencial.
Para muchos dirigente del PP la decisión de mantener a Camps a pesar de que el partido volverá a ser la fuerza política vencedora en los comicios de mayo, según las encuestas, es incomprensible. "La marca del PP gana de forma aplastante las elecciones y el PSOE aquí en Valencia no existe. ¿Qué necesidad hay de mantener a Camps y su equipo?", defiende en este portal.
"Dicen que no hay duda de que es el candidato, pero ya han designado oficialmente a Rudi, Cervera, Bouza, Pérez-Espinosa o Monago. Y desde luego nadie duda de Arenas o Cospedal. Pero han dejado la puerta abierta en Valencia", recuerda.
Sin embargo, Camps parece darse cuenta de que el respaldo del partido disminuye con el paso del tiempo y actúa en consecuencia. "Camps evita convocar a la Junta Directiva Nacional, porque sabe que hay voces críticas. Solo se reúne con el Comité Ejecutivo, porque lo controla él".
El ejemplo de sus temores a perder poder dentro de la formación se vio la semana pasada cuando dio un margen de 48 horas a los responsables de municipios de más de 20.000 ciudadanos para que escogieran a sus cabezas de cartel sin apenas opción de elección.
Entidades
