¿Es posible con un sueldo de 70.000 euros brutos al año comprarse un palacete en pleno centro de Palma de Mallorca de 657metros cuadrados valorado en 2,5 millones de euros? ¿Es suficiente ese dinero para crear un pequeño imperio inmobiliario con pisos, locales y aparcamientos en las zonas más exclusivas de las Islas Baleares? Jaume Matas, ex ministro y presidente del Gobierno balear entre los años 2003 y 2007, ha demostrado que sí.
Empleado actualmente en las oficinas de PricewaterhouseCoopers en Estados Unidos, Matas se enfrenta a una investigación por parte de la Agencia Tributaria, que ha visto ya indicios de delito ante el desmesurado crecimiento no sólo de su patrimonio, sino también el de otros miembros de su familia.
Los imputados en el caso
Y no sólo eso. Ayer, el titular del Juzgado de Instrucción número tres de Palma, José Castro, dictó una providencia en la que cita a declarar como imputados por el caso Palma Arena -el coste de este velódromo se disparó de 40 a 110 millones por el presunto pago de comisiones- a Jaume Matas; a su mujer, María Teresa Areal; a su cuñado, Fernando Areal y a Bartomeu Reus, presidente de Gesa- Endesa.
Areal, que ocupó el cargo de gerente del PP de Baleares entre los años 2003 y 2008, ya ha sido interrogado por el juez ante las sospechas que le sitúan como posible testaferro del ex presidente.
Datos en el Registro
De acuerdo con los datos del Registro Mercantil, figura o ha figurado en el pasado como consejero, gestor o apoderado de varias sicavs, las sociedades de inversión que utilizan las grandes fortunas para tributar a Hacienda tan sólo por el 1 por ciento de sus beneficios, que podrían estar ligadas a personas que habrían obtenido jugosos contratos con la Administración Matas.
El informe de la Fiscalía ha apuntado a las firmas Balear Ahorro y Videowave, además de Inversiones Chut Sicav, a la ya extinguida Binigabri y, de manera indirecta, a la sociedad de valores Arcalia Patrimonios, de la que Areal abandonó su cargo de apoderado en junio de 2009.
Aunque Fernando Areal sólo aparece ya como consejero de una de ellas (Videowave Sicav, una firma presidida por Luis Carrasco García, que a 31 de junio de este año tenía un patrimonio de 4,2 millones de euros), en la época en la que participó en la gestión de estas firmas sus activos llegaron a sumar 140 millones de euros. La mayor de todas las sociedades es Balear Ahorro, que tenía al cierre de 2007 unos activos valorados en 76,3 millones de euros. Ese año Arcalia Patrimonios sumaba 54,9 millones; Videowave, 10,6 millones; Chut Sicav, 7,9 millones y Binigabri, 2,89 millones de euros.
Lea la información al completo en el diario elEconomista en su quiosco por tan sólo 1,20 céntimos
Entidades
Jaume Matas imputado en el 'caso Palma Arena'
Financiación irregular en Baleares