El Partido Popular (PP) denunció el domingo una campaña de "desprestigio" contra sus cargos públicos en la que implicó al ministerio del Interior y al grupo de comunicación Prisa, en el marco de la investigación sobre un caso de corrupción, la llamada 'trama Gürtel'.
El PP sufre "una campaña sistemáticamente programada y ejecutada de ataque y desprestigio de sus cargos públicos y del propio partido, en la que se utilizan de manera ilegítima los medios del Estado y, como instrumento de difusión, a un determinado grupo de comunicación", denunció en un comunicado.
Varios cargos del PP son investigados desde febrero por el llamado 'caso Gürtel' de supuestas comisiones pagadas o regalos enviados a cargos públicos del PP en las regiones de Madrid y Valencia por un grupo de empresarios cercanos a la formación para lograr contratos para organizar eventos y favores de las instituciones.
El tesorero del PP, Luis Bárcenas, y el presidente del Gobierno de la región de Valencia, Francisco Camps, están imputados; el segundo ya ha declarado ante el juez y el primero lo hará esta semana. Ninguno de ellos ha dimitido y el presidente del partido, Mariano Rajoy, los apoya.
El PP criticó en el comunicado que "a las primeras filtraciones de las actuaciones sumariales secretas" se suman, "en las ultimas semanas, filtraciones de conversaciones telefónicas realizadas por la policía judicial", que ha publicado en los últimos meses el diario El País, del grupo PRISA (PRS.MC)
Por eso, el partido exigió el domingo "la comparecencia conjunta y urgente de los ministros de Interior y de Justicia" en el Parlamento para que expliquen las filtraciones de las grabaciones telefónicas hechas por la policía judicial.
La formación conservadora estima "intolerable y una gravísima conculcación" que el ministerio del Interior "esté inmerso en casos tan flagrantes de vulneración de los derechos".
Además, acusa al gobierno socialista y a la Fiscalía General de "connivencia y aprovechamiento político de estas conductas".
El PSOE respondió el domingo por la noche al comunicado de los conservadores acusando al PP de llevar a cabo una "burda estrategia para eludir sus responsabilidades" y pidiéndole que "deje de atacar al Estado de derecho".
Precisamente la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, anunció que interpondrá una demanda contra "los responsables de la difamación publicada este fin de semana por los medios del Grupo Prisa", según el comunicado del PP.
El diario El País afirmó el domingo que Barberá recibió como regalo bolsos de la marca de lujo Louis Vuitton por parte de uno de los empresarios investigados.
La investigación fue iniciada por el juez Baltasar Garzón, quien posteriormente la trasladó a los tribunales provinciales.