Miembros de la cúpula del Partido Popular, alcaldes y afiliados temen que el caso Gürtel se cobre la presidencia de Mariano Rajoy, que podría ser víctima del chantaje y estar perdiendo las riendas del partido a marchas forzadas.
Dejar pasar la tensión, no alimentar a la prensa y decidir qué hacer de forma interna a finales de julio. Esos fueron los consejos de Mariano Rajoy, el presidente popular ante la presunta trama de corrupción Gürtel y sobre todo ante el caso del tesorero Luis Bárcenas. Palabras que han hecho saltar las alarmas nos sólo en Génova sino en todos los municipios populares españoles.
Dirigentes del partido han asegurado que no es normal ni se puede entender que el líder del principal partido de la oposición opte por la callada en una situación como la actual. Para los populares la situación requiere de agallas y de ganas de aclarar la situación, de la defensa de un partido y su claridad. "Esta situación hay que terminarla cuanto antes", aseguraba un 'popular', según informa el diario El País. "Pero los ritmos de Rajoy son extraños", matizaba.
Bárcenas preocupa en el PP
Uno de los temas que más preocupa dentro de la oposición en el caso del tesorero, Luis Bárcenas. Aunque la tensión se ha relajado esta semana, lo cierto es que las declaraciones del tesorero sobre nueve cajas con información "delicada" sobre las auotoridades del partido han tensionado el ambiente. Estas palabras han sonado a chantaje dentro del partido y como consecuencia ya se pide la dimisión de Bárcenas. "Estoy que sí", aseguraba en este sentido el presidente de la Diputación de Orense, Jose Luis Baltar, y uno de los pesos pesados del partido.
De momento, Rajoy ha optado por la paciencia y seguir apoyando a Bárcenas. ¿Un gran plan estratégico o el silencio que le costará la dirección de los populares?
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