El presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, ha desmentido hoy "de pleno" la implicación en la presunta trama de corrupción y anunció que emprenderá todas las acciones legales "en defensa de su honor, del PP y del cargo que representa". Análisis: "El cohecho inconcebible del presidente"
Camps en una comparecencia en el Palau de la Generalitat, flanqueado por todos los consellers y la alcaldesa Rita Barberá, enmarcó estas acusaciones en la "causa abierta contra el PP".
El diario El País publica hoy, en su portada, que el presidente de la Generalitat valenciana sería uno de los aforados que investiga el juez Garzón en el contexto de la operación "Gürtel" (correa, en aleman). Según el diario, que cita fuentes de la investigación, el informe de la Fiscalía "cita una pequeña ramificación de la red corrupta con el pago de los supuestos sobornos por los negocios facilitados desde la Comunidad Valenciana".
En las grabaciones aportadas en la denuncia "aparece una frase imputada a Correa -dice el País- que alude al pago de 30.000 euros en trajes para el presidente valenciano, Francisco Camps. Garzón ha investigado tres facturas sobre este punto".
Ésta sería, según el diario, "la única referencia al pago de sobornos a cambio de un trato privilegiado con la Administración valenciana". Fuentes de la Generalitat ya negaron veracidad a estas acusaciones en una anterior ocasión cuando se conoció la información, aunque entonces no se especificaba quién era la persona aforada a la que se referían.