Rajoy le dijo a Zapatero que ya que acudía a la Cámara Baja, podía hacerlo "para algo más que para cubrir las apariencias" y le pidió que "deje de ser parte del problema, si no está capacitado o dispuesto a dar soluciones o a contribuir a ellas".
El líder del PP afirmó que el discurso de Zapatero disimula el desconcierto y se caracteriza por la ausencia de respuestas serias.
Rajoy acusó al presidente del Gobierno de haber ocultado "deliberadamente" los problemas económicos por la proximidad de las elecciones y después intentar minimizar las dificultades, al decir que eran "transitorias y breves, y no había problemas para afrontarlas".