
El Senado estadounidense aprobó este jueves una histórica reforma migratoria, que si es adoptada sin cambios en la Cámara de Representanes, llevaría a la legalización de 11 millones de indocumentados pero también a un endurecimiento inédito de la frontera con México. Una histórica reforma migratoria en EEUU pasa el primer escollo
Con 68 votos a favor y 32 en contra de 100 senadores, la cámara alta dio el visto bueno a un proyecto que supone la reforma más importante en un cuarto de siglo del sistema de inmigración en Estados Unidos, que ha devenido obsoleto.
Dentro de la cámara senatorial, grupos propulsores de la ley gritaron "Yes we can" y "yes we did" ("Sí podemos" y "sí lo hicimos"), tan pronto el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, en su calidad de presidente del Senado, dio el resultado de la votación.
"Es el inicio de un día maravilloso para Estados Unidos porque siempre ha sido una nación de inmigrantes", dijo el senador demócrata Charles Schumer, descendiente de una familia judía procedente de Rusia y Polonia.
"Los inmigrantes siempre han sido los grandes motores del crecimiento económico, innovación y renovación que este país ha conocido", agregó Schumer, integrante del grupo bipartidista -cuatro demócratas y cuatro republicanos- que preparó el texto original.
El proyecto de ley 744 fue objeto de centenares de enmiendas, primero en el Comité Judicial y luego en el pleno del Senado, principalmente dirigidos a reforzar la seguridad fronteriza, tema crucial para lograr el apoyo de algunos republicanos.
Pero la aprobación de la histórica reforma en el Senado implica la mitad del camino recorrido por este proyecto, ya que después caerá en manos de la Cámara de Representantes, dominada por la oposición republicana.
Aun podrían pasar meses antes de que un texto definitivo llegue al escritorio de Barack Obama para promulgarlo como ley, pero es lo más cerca que han estado los millones de inmigrantes indocumentados de obtener sus papeles.
El presidente estadounidense celebró el voto en el Senado y pidió a la Cámara de Representantes seguir el ejemplo.
"Estamos un paso más cerca de arreglar nuestro sistema migratorio fracturado de una vez por todas", dijo Obama, advirtiendo que ahora los detractores del proyecto harán todo lo posible para romper el acuerdo bipartidista.