El presidente estadounidense, Barack Obama, ha anunciado este martes un plan para luchar contra el cambio climático que incluye la reducción de las emisiones de CO2 de las centrales eléctricas estadounidenses. Además, ha insinuado que podría vetar el proyecto Keystone XL para la construcción de un oleoducto entre Canadá y Texas si ocasiona un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Obama aprovecha sus poderes ejecutivos para impulsar este nuevo plan, por el que ordena a la Agencia de Protección Ambiental la instauración de nuevas normas sobre emisiones que afectan a miles de centrales eléctricas, la mayoría alimentadas por carbón. Sólo estas centrales suponen un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero de Estados Unidos.
Los detalles de la nueva normativa serán elaborados en los próximos meses con la intención de que entren en vigor en junio de 2015, ha explicado Obama.