El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha destacado la necesidad de reformar el sistema inmigratorio del país y anunciado duras medidas contra las empresas estadounidenses que contraten indocumentados de forma intencionada.
"Lo que quiero es un sistema en el que aseguremos nuestras fronteras (...) y que empecemos a tomar medidas duras contra las compañías que intencionadamente contratan trabajadores indocumentados y que hacen descender los salarios de los trabajadores estadounidenses", ha señalado Obama durante un discurso pronunciado en la localidad de Ottumwa, estado de Iowa.
El presidente norteamericano ha indicado que el Congreso debe trabajar en "una ley de sentido común" que establezca un aumento de la seguridad en las fronteras pero que reconozca también las necesidades humanitarias de los inmigrantes indocumentados que actualmente viven en Estados Unidos.
Con la polémica de la ley Arizona
Estas declaraciones se producen a pocos días de ser promulgada la ley sobre inmigración del Estado de Arizona, que ha abierto un debate sobre la dudosa legalidad de una norma que criminaliza a la inmigración indocumentada. "La ley viola la Constitución de Estados Unidos". Los expertos consultados por la cadena BBC sostienen así de firmes su opinión sobre la norma del Estado fronterizo con México.
La dudosa constitucionalidad de la ley de Arizona 
