El ejercito estadounidense revisará el empleo de su fuerza aérea en Afganistán para intentar evitar víctimas civiles, indicó el jueves el Secretario de Defensa Robert Gates.
"En situación de defensa, no creo que debamos modificar nada", indicó. "Debemos proteger a nuestras topas", explicó Gates, respondiendo sobre los cambios que implicará la llegada anunciada de 21.000 soldados estadounidenses, que podría significar una menor necesidad de apoyo aéreo.
"Pero durante las ofensivas, debemos contemplar más minuciosamente (...) la manera de minimizar los riesgos de pérdidas civiles inocentes", precisó.