Bosch celebra este año el 75 aniversario del coche diésel, dado que en 1936 la multinacional germana suministró el primer motor de este tipo que se instaló en un turismo. Aunque en 1927 ya se utilizaba en vehículos industriales.
Robert Bosch, fundador de la compañía, dio la orden para iniciar la producción de la bomba de inyección diésel en el año 1922, y dos años después el sistema comenzaba a utilizarse en vehículos industriales. En 1927 arrancó la producción masiva de la nueva tecnología.
La crisis del petróleo agudizó el ingenio
Desde entonces, el diésel ha mantenido un desarrollo formidable, con picos de producción en la década de los setenta, ya que los fabricantes buscaron menores consumos como consecuencia de la crisis del petróleo, y a raíz de la invención del sistema de inyección directa 'common rail'.
Según Bosch, el motor diésel del futuro tendrá un cubicaje menor, que podría situarse en torno a 1.100 centímetros cúbicos, y funcionará únicamente con tres cilindros, sin perder prestaciones, en el marco de las nuevas técnicas de downsizing.
Buenas perspectivas de futuro
Gracias a la incorporación de nuevas tecnologías, entre las que destaca el sistema start/stop, el consumo medio de un motor diésel se reducirá un 30% hasta situarse en 3,6 litros a los cien kilómetros en el horizonte de 2015. Con el avance de los híbridos, esta disminución alcanzará el 40%.
El diésel igual que la gasolina
