Ya habíamos probado la versión que montaba el propulsor 1.4 con el acabado Titanium y teníamos curiosidad por conocer el más potente de la gama, el 1.6 de 120 CV. Además Ford acaba de sacar al mercado otro acabado más llamado "Individual" el cual llevaba la unidad probada.
Este propulsor nos ha impresionado gratamente ya que permite acelerar mucho. Reacciona rápido a cualquier solicitud del pie y prefiere ir arriba, alrededor de 4.000 rpm, ya que tiene un carácter puntiagudo. Unido a este elemento va la caja de cambios que permite aprovecharlo gracias a unas relaciones cortas. Tiene cinco marchas y se agradecería una sexta para viaje largos; aún con todo, el Coupé Sport obtuvo unos buenos consumos medios de casi seis litros. Es capaz de llevar al coche a una velocidad máxima es de 190 Km/h y acelerarlo de 0 a 100 en 9,9 segundos.
Este potente motor va sujetado por un bastidor que puede con él de sobra y permite tomar curvas muy rápido o moverse con destreza por ciudad. Este elemento ha sido muy bien configurado por Ford, ya que junto con las confortables suspensiones de carácter seco, pero no duro, obtienen un equilibrio entre comodidad y deportividad. Todo el conjunto dinámico permite una conducción rápida sin tener que padecer balanceos por parte de la carrocería. A este elemento se le une la dirección que como pudimos ver en el 1.4 es rápida, directa y da confianza pero que no transmite el asfalto al conductor. Según la velocidad a la que vayamos influirá su asistencia de forma graduada y a bajas velocidades aparcar sin esfuerzo aún montando unos neumáticos con medida 205/40 R 17.
Dinámicamente es un coche noble con un eje trasero que junto con el tren delantero lleva a Fiesta por raíles y sólo yendo muy al límite querrá adelantarnos el trasero. Es neutro en sus reacciones y da seguridad al conducirlo. Es un coche ágil y que da sensación de ligereza ya sea con este motor o en el anterior probado que era menos potente. El control de estabilidad, desconectable desde el salpicadero, no actuó en toda la prueba.
Durante el ensayo los frenos estuvieron bien y no se sobrecalentaron. Lleva discos ventilados de 258 mm delante y de tambor atrás, unidos por un doble circuito en diagonal con servo y ABS+EBD. También cuenta con IVD/ESP, Control de Tracción, EBD y EBA.
La seguridad pasiva destaca por el Sistema de Protección Inteligente (IPS). Lleva airbags de rodilla además de laterales, de cabeza- tórax y de cortina. También dispone de anclajes ISOFIX para asientos infantiles en los asientos exteriores de la segunda fila.
El Ford Fiesta tenía tres puertas y sin embargo mantiene la sensación de espacio que apreciamos en el cinco puertas y la visibilidad sigue siendo buena. Los asientos sujetan bien y lo único que echamos en falta es una memoria de posición de recorrido ya que hay que volver ajustarlo una vez hayan entrado los ocupantes a la zona trasera. Una pena ya que en conjunto el interior destaca por sus asientos con buenas cotas para todo tipo de ocupantes. De este interior añadimos que es abierto -incluso con el extra de ventanas traseras obscurecidas- y practico gracias a los suficientes lugares que tiene repartidos para dejar objetos. Destaca la buena posición del conductor junto a sus mandos y relojes -lástima que no lleve termómetro del agua- y la calidad de rodadura que tiene para ser un utilitario. Es un vehículo, como decimos, amplio y que dispone de un utilizable maletero gracias a sus formas cuadradas.
El interior del vehículo probado va equipado con la terminación "Individual". Este es un acabado especial de personalización que se aplica sólo a las variantes Titanium y Sport del Ford Fiesta. Se puede escoger entre dos paquetes; uno que llamado Individual Piel Burdeos Soho / Plata Silver, y otro denominado Individual Piel Azul Blue / Plata Silver.
Se compone de un pomo de palanca de cambios exclusivo, el freno de mano y el volante forrados en piel, alfombrillas exclusivas y asientos e insertos en piel con la inscripción del nombre del acabado grabada en la parte superior del respaldo. La unidad probada llevaba el acabado Azul Plata y debemos decir que es muy llamativo y envolvente. La sensación es divertida y va en la línea "Kinetic Design" que predica el fabricante americano. Los elementos usados nos parecieron de calidad y tenían una buena terminación. Además existe un kit exterior para el coche. El precio de este elemento extra es 1.100 euros y no nos parece caro ya que implica estar forrado en cuero bicolor.
Este coche no nos parece caro ya que el punto de partida son 15.590 euros y habrá que tener en cuenta los descuentos que la marca ofrezca. La posibilidad de aumentar su equipamiento es grande y queda a cargo de nuestro bolsillo hacerlo. La unidad probada llevaba además del paquete Individual prácticamente todo lo que puede pedirse llegando a costar 19.700 euros. Echamos en falta la opción de un GPS integrado ya que es un elemento que en ciudad viene muy bien y en largos viajes, que el Ford Fiesta puede realizar gracias a sus 120 CV, no estaría mal. No obstante, destacamos dentro de los opcionales el manejable climatizador que vale sólo 250 euros y las bonitas llantas de 17 pulgadas, incluyen IVD, por 415 euros. Otro extra que debería ser tenido en cuenta son los airbags de cortina 240 euros y el reposacabezas central que cuesta 40 euros.
En conjunto tenemos un utilitario muy rápido y potente, que consume poco, muy manejable en ciudad, seguro en carretera y con una terminación y calidad de rodadura excelente. A esto se le suma la posibilidad de una gran variedad de pinturas, acabados y extras que ofrece el fabricante que incluyen hasta un "Love Factory".