Los concesionarios españoles han automatriculado 125.000 coches hasta el mes de noviembre, lo que supone un 11% del total de ventas que se han registrado en el mercado nacional entre enero y el undécimo mes del año, según datos de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).
MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
En el encuentro anual de Faconauto con la prensa, el presidente de la federación, Gerardo Pérez, ha alertado de que hasta el 20% de las ventas de algunos fabricantes son automatriculaciones, mientras que para otras marcas suponen un 4%.
Pérez ha subrayado que es una "política inadmisible" llevada a cabo por parte de ciertos fabricantes que causa un "mercado insano". "Al final, el mercado acabará explotando como lo ha hecho el de la vivienda", ha apuntado.
En este sentido, ha defendido que los concesionarios deben automatricular una cantidad determinada de vehículos que el mercado sea "capaz de absorber", ya que un coche automatriculado puede tardar hasta cuatro meses en venderse, "una barbaridad", según el máximo responsable de Faconauto.
"EL MOVALT ES UNA CHAPUZA"
Por otro lado, el presidente de la federación ha señalado que el Plan Movalt, que agotó casi la totalidad de sus 20 millones de presupuesto en apenas 24 horas, es una "chapuza" para un país como España, que "pretende ser líder en movilidad eléctrica".
La patronal de los concesionarios ya señaló en su día que el nuevo plan de incentivo a la compra de vehículos impulsados por energías alternativas era "poco ambicioso". Además, lamentó que no estuviese vinculado a una estrategia de movilidad global, que tenga en cuenta los objetivos en materia climática, que requiere, en primer término, generar una renovación intensiva y mantenida en el tiempo del parque automovilístico.
Así, Pérez ha destacado que a España se les están escapando varios trenes que "no van a volver". Ante esta situación, Faconauto ha reclamado al Gobierno que implemente un plan a tres años que evite caídas en la demanda.
Por otro lado, Faconauto y la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) también han reivindicado, en numerosas ocasiones, que se cambie la fiscalidad del automóvil, primando al uso del vehículo y no a la compra.
"No queremos que se pague menos, sino diferente. Además, tampoco se trata de reducir impuestos en el momento en el que estamos", ha concluido.