La revolución interna que está experimentando el grupo PSA ya está alcanzando a las propias estrategias de producto.
Si hace unas semanas dábamos a conocer la interrupción del proyecto de coche híbrido de aire comprimido, ahora la marca ha anunciado que retoma su línea de vehículos urbanos. Recordemos el primer intento de 2011 con los Peugeot iOn y Citroën C-Zero, primos a su vez del Mitsubishi i-Miev.
Pero ahora el desarrollo será propio y, según ha desvelado el presidente del grupo Carlos Tavares al periódico Le Monde, estará destinado a los modelos más pequeños de las marcas pertenecientes a PSA. Estos lanzamientos estarían preparándose para finales de esta misma década y serían, hablando tecnológicamente, la próxima generación de vehículos eléctricos.
Motores híbridos, de gasolina y recargables
La razón de esta vuelta al eléctrico sería de razón económica, pues los proyectos híbridos que se están desarrollando en estos momentos para adaptarlos a las nuevas plataformas EMP2 del grupo no resultan rentables en vehículos pequeños. Mientras se empieza a desarrollar la nueva tecnología eléctrica, se está trabajando ya en un motor híbrido de gasolina y recargable que reemplace al actual, asociado a motores térmicos diésel.
Los modelos basados en la plataforma EMP2 son los Peugeot 308 y Citroën C4, mientras que la nueva motorización eléctrica se destinará a los derivados de la EMP1, o sea similares a los Peugeot 208 y Peugeot C3.
El presidente de PSA no ha descartado, sin embargo, posibles acuerdos con otras marcas para desarrollar estas nuevas tecnologías, tanto híbridas como puramente eléctricas, práctica que se está generalizando cada vez más en favor de reducir los ingentes costes de investigación y desarrollo.
Por otro lado, la noticia de la nueva apuesta de PSA por los eléctricos abre nuevas expectativas para la planta gallega de Vigo, donde ya se fabrican vehículos totalmente eléctricos como el Peugeot Partner y el Citroën Berlingo.
El momento actual de PSA
