El Bugatti Veyron tiene un motor de 16 cilindros, 8 litros de cubicaje y 1.001 caballos de potencia. Acelera de 0 a 100 kilómetros por hora en 2,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 407 kilómetros por hora. Tiene un consumo medio homologado de 16,2 litros de gasolina de 100 octanos a los cien kilómetros.
Si encontrásemos una recta lo suficientemente larga y alcanzáramos la velocidad máxima, el consumo se elevaría a cifras superiores a los 80 litros a los cien. El depósito de combustible del Veyron, de 100 litros de capacidad, nos daría una autonomía de aproximadamente 12 minutos, durante los que podríamos recorrer como mucho unos cien kilómetros.
El Bugatti Veyron era considerado hasta el coche con mayor velocidad punta del mundo hasta hace unos meses, pues el pasado marzo dicho honor le fue arrebatado por el Hennessey Venom GT, que logró alcanzar los 435 km/h y superar así los 415 km/h que logró en 2010 el Veyron. Sin embargo, el superdeportivo de Bugatti sigue siendo el más rápido en acelerar desde el reposo, necesitando sólo 2,5 segundos para llegar a los 100 km/h frente a los 2,7 del Hennessey.