
A día de hoy, y a diferencia de los ilegalizados inhibidores, los detectores de radar siguen siendo legales. Pero con la entrada en vigor del nuevo Código de Circulación prevista para la primera mitad de 2014, estos dispositivos también pasarán a ser ilegales y, sin embargo, sus fabricantes no cesan en su empeño por deshacerse de todo el stock posible sin decir "toda la verdad".
Tal es la denuncia de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) al respecto de la "publicidad engañosa" que hacen las marcas de detectores de radar asegurando que sus productos son "100% legales". Efectivamente, lo son a día de hoy pero se sabe que dejarán de serlo: en cuanto se apruebe la nueva ley de tráfico, que ya ha sido tramitada en el Congreso de los Diputados, la utilización de estos dispositivos acarreará una multa de 200 euros y la pérdida de 3 puntos del carné. Sin embargo, los fabricantes tratan de aprovechar el desconocimiento del público general para tratar de obtener los máximos ingresos por ventas posibles antes de la ilegalización.
En concreto, la OCU se centra en el caso de uno de estos detectores de radar en concreto, el Angel Driver F18, a partir de cuyo anuncio televisivo la asociación ha recibido varias quejas de publicidad engañosa. "Desde OCU entendemos que un dispositivo como este es un bien duradero y no se adquiere para unos pocos meses. Por ello, tras las quejas recibidas a través de Protestapp, hemos presentado una denuncia administrativa contra Publipunto por la publicidad engañosa que realiza en los medios de comunicación sobre el detector de radares Angel Driver F18".
Por otro lado, cabe recordar que sí se podrá seguir utlizando, en cambio, los avisadores que informan de la posición de radares a partir de los datos previamente facilitados por la Dirección General de Tráfico (DGT), esos que normalmente suelen utilizar los sistemas de GPS, o las aplicaciones de teléfonos móviles.