Los tres principales fabricantes de automóviles de Estados Unidos, General Motors, Ford y Chrysler, todos ellos asentados en la ciudad de Detroit (Michigan), cerraron el pasado ejercicio con incrementos de matriculaciones en su mercado local, según datos de las diferentes compañías.
El primer fabricante de automóviles del país, General Motors, contabilizó un volumen de entregas en Estados Unidos de 2,59 millones de unidades en 2012, lo que supone un crecimiento del 3,7% respecto a los datos obtenidos en 2011. En diciembre, la empresa vendió 245.733 unidades, un 4,9% más.
El grupo Ford, de su lado, comercializó 2,25 millones de vehículos de todas sus marcas en Estados Unidos el pasado ejercicio, un 4,7% más, y 214.222 unidades durante el pasado mes de diciembre, un 1,9% más que en el mismo período de 2011.
Por su parte, el consorcio Chrysler, propiedad de la italiana Fiat, logró un aumento del 21% en sus ventas estadounidenses en 2012, hasta 1,65 millones de unidades. El crecimiento en diciembre alcanzó el 10%, con 152.367 unidades.
