Los vertiginosos 1.200 CV del Bugatti Veyron, el coche más rápido del mundo, podrían quedar pulverizados muy pronto de materializarse la promesa del fabricante alemán Rotary Supercars, que pretende construir un superdeporivo de 2.800 CV para acelerar de 0 a 100 km/h en menos de un segundo y alcanzar hasta 450 km/h. ¿Realidad o ficción?
De momento, eso es lo único que ha aportado Rotary sobre ese futuro supercoche: utópicos datos sobre el papel que hasta ahora no han sido vistos antes en un coche. Para sostener su promesa, tan sólo ha publicado en su web un vídeo teaser en el que apenas se deja ver la silueta de tan ambicioso deportivo y el mensaje "está en camino".
La expectación es grande pero la confianza en que esta bestia con motor pueda hacerse realidad no es mucha: tal y como señala AutoBild.es, cabe recordar el frustrado proyecto del Predator GT que, con 1.200 CV, también pretendía desbancar al Bugatti Veyron y que, sin embargo, sigue aún sin ser producido.
Teaser from RSC Germany on Vimeo.