
El Prat de Llobregat (Barcelona), 5 abr (EFE).- La normalidad en los vuelos y la gran afluencia de pasajeros son las dos principales características hoy en la primera jornada de operación salida en el Aeropuerto de El Prat, donde se han programado 844 vuelos, según ha informado Aena.
Los vuelos cumplen esta mañana sus horarios previstos, excepto contadas excepciones, como un vuelo a Nueva York u otro que debía salir hacia Estocolmo, según ha podido comprobar Efe.
La afluencia de usuarios es notable desde primera hora de la mañana en las dos terminales del aeropuerto, con un público mayoritariamente familiar, que elige destinos próximos para pasar estos días de vacaciones.
"La crisis no nos da mucho margen, así que hemos decidido pasar estos días en París. Tenemos costumbre de viajar siempre en Semana Santa, pero desde hace unos años elegimos destinos más próximos", comentaba Lucía en la cola de embarque.
Muchos viajeros también aprovechan para ir a visitar a la familia. "Nosotros nos vamos a Cardiff a visitar a nuestra hija, que está allí aprendiendo inglés. Tenemos previsto hacer turismo en la zona, viajar a Londres y conocer el entorno en el que ella se mueve", decía Loli, mientras esperaba su turno en el mostrador de facturación de Vueling.
Antonio y Marisa viajaban a Amsterdam para visitar a su hijo, que está haciendo un Erasmus en Holanda.
"No hemos ido nunca y estamos deseando ver cómo es. Estos días estábamos un poco intranquilos porque pensábamos que nos iba a afectar la huelga de controladores de Francia, pero nos han dicho en información que no hay problemas", explicaba Marisa, camino del filtro de seguridad.
Barcelona también es un atractivo destino turístico para personas de otros países y otras comunidades autónomas españolas. Es por ello que la zona de llegadas registra esta mañana una gran actividad.
Abel ha llegado procedente de Lugo "para visitar a un amigo que vive en Mataró. No he estado nunca en Barcelona, así que vengo preparado para hacer turismo".
La parrilla de taxis de la T1 está hoy repleta de taxis que esperan pasaje. Uno de los taxistas comentaba que "hay mucho más público que un día normal, pero también hay que reconocer que muchos usuarios prefieren coger el autobús lanzadera hasta el tren. Es más incómodo pero más barato que coger un taxi".