El presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam), Juan Antonio Sánchez Torres, confía en que las compras de empresas y 'rent a car' consigan atenuar la caída del mercado automovilístico hasta el 10%, lo que en cualquier caso supondría cerrar 2011 por debajo de las 900.000 unidades.
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
No obstante, Sánchez Torres advirtió de que el incremento de las ventas a empresas de alquiler puede ser "meramente estacional" ante la Semana Santa y la temporada estival, y ante el repunte del turismo por del desvío de viajeros procedentes de países del Norte de Africa en los que se están produciendo revueltas políticas y sociales.
El máximo responsable de Ganvam también confía en que las empresas sigan renovando sus flotas en la segunda mitad de 2011, después de que la crisis provocara una ampliación de los contratos de renting, en el marco de las estrategias de ahorro y control de costes.
En todo caso, Sánchez Torres subraya que la recuperación de la demanda automovilística no llegará hasta que no se produzca una mejora real de la situación económica. "La subida de los tipos de interés y las restricciones del crédito se ciernen como una amenaza sobre empresas y familias, restando confianza y debilitando el consumo", apuntó.
Por último, insistió en que la caída de las ventas puede provocar la pérdida de 5.000 empleos y la desaparición de 500 empresas en el sector de la distribución, que se sumarían a los 35.000 puestos de trabajo y a las 2.000 concesionarios perdidos desde el comienzo de la crisis.
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