El grupo japonés Toyota, primer fabricante mundial de automóviles, dejó hoy claro que no tiene previsto acometer una nueva campaña de revisión de su modelo híbrido Prius, relacionada con el accionamiento involuntario del acelerador por el mal colocamiento de una alfombrilla.
Toyota sale así al paso de la información publicada por The Wall Street Journal y reproducida por otros medios, en la que se asegura que la empresa llamará a revisión a los Prius fabricados entre 2004 y 2009 después de que un conductor de 61 años denunciara ayer en San Diego la aceleración "no intencionada" de su coche.
La corporación nipona aclaró que el pasado 2 de noviembre anunció una campaña de revisión voluntaria por el problema de las alfombrillas, en la que ya se incluyó a los Prius fabricados entre los años 2004 y 2009.