La Conselleria de Trabajo de la Generalitat de Catalunya deberá dictar en un máximo de 15 días una resolución sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por Pirelli para cerrar la fábrica de Manresa y despedir a sus 491 trabajadores, después que la última reunión del periodo de consultas finalizara hoy sin acuerdo entre empresa y sindicatos.
Tras un breve encuentro de apenas diez minutos, según UGT de Catalunya, la dirección se mantuvo firme en su oferta de indemnizaciones y se negó a incrementarlas por encima de los 55 días por año que recibieron los que abandonaron la fábrica en el ERE del pasado diciembre, algo que el comité reclamaba porque asegura que el cierre es "injustificado".
En declaraciones a Europa Press, el responsable de UGT en el comité, Emilio Ureña, sostuvo que los trabajadores entienden que "no hay causas ni económicas, ni productivas, ni tampoco de mercado como dice la empresa, ya que la producción de Manresa no se elimina sino que se traslada a otros países".