NUEVA YORK, 17 (del corresponsal de EUROPA PRESS, Emilio López Romero)
Chrysler, el tercer fabricante de coches de Estados Unidos, anunció este martes 3.000 nuevos despidos como parte de su plan de reestructuración presentado al Departamento del Tesoro, y solicitó a la Casa Blanca otros 5.000 millones de dólares para sobrevivir a la crisis.
El fabricante, que a finales de diciembre recibió 4.000 millones de dólares, había solicitado en un principio otros 3.000 millones para hacer frente a la crisis que atraviesa el sector, pero finalmente dijo que necesitará 5.000 millones ante la fuerte caída de las ventas.
Además de los despidos, Chrysler anunció que dejará de fabricar tres modelos de vehículos, y aseguró que el sindicato United Auto Workers ha aceptado algunas concesiones y que se han producido avances con los tenedores de bonos y los concesionarios.
La compañía con sede en Auburn Hills, en Michigan, comunicó también al Tesoro que sus ventas cayeron un 55 por ciento el pasado mes de enero, después de que cerrara el año 2008 con un descenso del 30 por ciento.
Chrysler adelantó que reducirá su capacidad de producción en 100.000 unidades y que lanzará un modelo de vehículo eléctrico antes de 2010, como parte de su plan de reestructuración del negocio.
Mientras, se espera que el principal fabricante del país, General Motors, dé a conocer los términos de su propio plan de reestructuración, que espera recibir otros 4.000 millones de dólares y prevé unos 31.000 nuevos despidos y el cierre de una decena de plantas.
