Unas 500.000 personas se encuentran afectadas por fuertes lluvias en regiones al norte, centro y sur de Perú, azotadas por desbordes de ríos y aludes que en dos meses han dejado 14 muertos y 24 desaparecidos, informó ese martes la Defensa Civil.
Las precipitaciones, iniciadas en enero, se intensificaron el último fin de semana y han causado estragos en 13 de los 24 departamentos del país tanto en la costa, los Andes y la región amazónica, informó Luis Palomino, jefe del Instituto de Defensa Civil.
Un informe de la entidad estatal señala que más de 500.000 personas resultaron afectadas por daños a sus tierras de cultivo, inundación de viviendas y el corte de electricidad.
Entre enero y febrero el balance precisa que 14 personas murieron sepultadas por aluviones, otras 16 quedaron heridas y 24 fueron declaradas desaparecidas, mientras que el número de damnificados es de 1.399 por haberlo perdido todo.
Hay familias que han sido reubicadas en zonas protegidas a las cuales se les está dando carpas hasta que puedan retornar a sus hogares afectados, dijo Palomino.
Ciro Mosqueira, sub jefe de Defensa Civil, detalló que las excesivas lluvias se vienen presentando también en los países vecinos Ecuador, Brasil y Bolivia.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología informó por su parte que las lluvias continuarán con fuerza en todo el país -sobre todo en el norte- hasta fines de abril, y llamó a las autoridades a tomar las medidas preventivas.
En la noche del lunes al martes un intenso aguacero hizo salir de su cauce al río Chico, cerca a la ciudad de Chincha, departamento sureño de Ica, inundando 150 hectáreas de cultivo y numerosas viviendas.
Ica, uno de los departamentos más afectados, aún no se repone del violento terremoto de 7,9 grados Richter que destruyó varias de sus ciudades el 15 de agosto pasado.
Las lluvias provocaron deslizamiento de lodo y piedras, cortando diversas carreteras, e hicieron aumentar el caudal de los ríos.
En varios tramos de la carretera Central -que une la capital con el centro del país- cayeron aludes en las últimas 24 horas que obligaron al envío de brigadas de trabajadores del ministerio de Transportes.
En la región norteña de Tumbes, en la frontera con Ecuador, el río Zarumilla se desbordó y afectó 300 viviendas y el Puente Internacional que conecta con el vecino país.
Bomberos tanto peruanos como ecuatorianos trabajaron en la remoción de lodo y escombros, mientras las autoridades regionales piden declarar la emergencia en la zona.
En el departamento amazónico de Ucayali (noreste) su presidente regional, Jorge Velásquez, manifestó que 2.000 hectáreas de cultivos resultaron dañadas y que hay poblados a los que no se puede llegar por los deslizamientos de lodo y piedras, por lo que pidió maquinaria pesada para la limpieza.
La situación también es preocupante en las partes altas del departamento de Lima y en la región surandina del país, especialmente en los departamentos de Huancavelica, Ayacucho, Cusco y Arequipa, que soportan intensas lluvias con perjuicio a viviendas y a la agricultura.
rm/pz