
Con 33 años de edad, John Terry es uno de los centrales más duros, rocosos y experimentados que la Premier League ha conocido a lo largo de su historia. Su temperamento y su carácter le han bastado en los últimos años para imponerse a delanteros de talla mundial como Wayne Rooney, Robin van Persie o Ruud van Nistelrooy. Pero el sábado pasado tuvo que hacer frente a una prueba que jamás había tenido: frenar 101 kilos de masa muscular.
Se llama Adebayo Akinfenwa, es un delantero inglés que milita en el Wimbledon, tiene 32 años de edad y el bíceps de su brazo es más grande y voluminoso que muchas de las piernas de sus rivales. Es la sorpresa que aguardaba al Chelsea en su primer partido de pretemporada, antes de emprender el viaje hacia tierras austriacas donde el conjunto inglés preparará el curso liguero.
Desde el banquillo José Mourinho conversaba - y reía - junto a Rui Faria y el resto de miembros de su cuerpo técnico acerca de la envergadura del colosal delantero. Su peso puso en jaque a una defensa tan joven como la que alineó el portugués en el primer tiempo: ni Christensen (18 años) ni el corpulento Zouma (19 años) pudieron frenarlo.
Mourinho se vio obligado a cambiar su defensa en el segundo tiempo, donde retiró a Christensen para dar entrada al capitán John Terry con el objetivo de borrar del mapa a Akinfenwa.
A pesar de su gran tamaño, Akinfenwa lleva con buen humor las bromas sobre su peso. Llegó, incluso, a bromear luciendo una camiseta donde se podía leer el siguiente mensaje: "Demasiado grande para poder jugar al fútbol jajaja".
Akinfenwa es un nómada de las divisiones inferiores del fútbol inglés Ha disputado 185 partidos en League One, correspondiente a la Segunda División B en España, y hasta 164 encuentros en League Two, equivalente a la Tercera División española. En estos 349 partidos ha marcado una media de 120 goles.