BERLÍN (Reuters) - El gabinete de la canciller alemana, Angela Merkel, firmó el miércoles un proyecto de ley que impone la prohibición efectiva de la controvertida técnica del 'fracking' (fracturación hidráulica) para extraer el gas de esquisto.
Esta técnica implica inyectar sustancias químicas y agua en formaciones rocosas subterráneas para liberar el gas atrapado. En un país densamente poblado, la oposición a esta técnica es fuerte por la preocupación sobre la contaminación del agua.
"Proteger la salud y el agua potable es prioritario. Por esta razón, queremos impedir el 'fracking' lo máximo posible", dijo la ministra de Medio Ambiente, Barbara Hendricks, en rueda de prensa.
La nueva ley, que tendrá que ser aprobada por el Parlamento, impondrá una prohibición completa de la fracturación hidráulica en los próximos años y sólo permitirá la perforación bajo condiciones estrictas.
Una vez que las perforaciones de prueba tengan éxito y un comité especial lo apruebe, la nueva ley podría permitir el 'fracking' comercial a partir de 2019 pero sólo en casos excepcionales.
La nueva norma permitirá la fracturación para las capas más profundas o de baja permeabilidad, una tecnología que se ha usado en Alemania durante décadas. Pero incluso este tipo de fracking estará sometido a normas más estrictas y a evaluaciones medioambientales, dijo Hendricks.