Por James Pomfret
CHASHAN China (Reuters) - La producción de un proveedor chino de Samsung Electronics se ha suspendido indefinidamente tras las sospechas de que la fábrica empleaba a niños.
Samsung, el mayor fabricante de teléfonos inteligentes del mundo, dijo la semana pasada que había dejado de hacer negocios con la fábrica Dongguan Shinyang Electronics, una subsidiaria propiedad completamente de la surcoreana Shinyang Engineering, después de que una auditoria arrojase pruebas sobre lo que Samsung calificó como supuesto trabajo infantil.
La fábrica Dongguan Shinyang es un edificio bajo en un polígono industrial en Chashan, uno de los cientos de pueblos repartidos por el delta del río Perla, en el sur de China, conocido como la fábrica del mundo.
En Seúl, un alto cargo de la empresa Shinyang Engineering dijo que su fábrica china ha estado inactiva desde el 14 de julio.
El responsable, que pidió no ser identificado ya que no estaba autorizado a hablar con los medios, dijo que Shinyang Engineering había pedido a las autoridades chinas que investigasen a la empresa que había suministrado la mano de obra a la fábrica.
"Esperamos que los problemas se resuelvan de forma rápida para poder reanudar la producción pronto", añadió.
La dirección de Dongguan Shinyang declinó reunirse o hablar con los periodistas de Reuters que recientemente visitaron la planta, pero un gerente que solo se identificó por su apellido, Xie, dijo que no había indicios de cuándo se retomaría la producción.
"Por supuesto que nos llevará algún tiempo volver a la normalidad", añadió.
Varios trabajadores de la planta dijeron que fueron obligados a presentarse a trabajar, pero que se les pidió limpiar la maquinaria y realizar otras tareas menores mientras la producción estaba detenida.
"Esta fábrica tiene una gerencia especialmente mala", dijo Lai Zhenxiong, un trabajador vestido con un uniforme color rosa brillante. "Espero que no terminemos perdiendo nuestros trabajos".
El gobierno local está investigando la fábrica, según un comunicado en su página web con fecha del 16 de julio, dos días después de que Samsung suspendiese su actividad.
El comunicado dijo que las autoridades no habían encontrado pruebas iniciales de trabajo infantil en la fábrica de Shinyang, pero añadió que la contratación ilegal de niños trabajadores menores de 16 años era un problema que preocupaba mucho.