MILÁN, Italia (Reuters) - La pasión de Italia por la comida es bien conocida en todo el mundo, pero más de la mitad de los italianos están ahora reciclando las sobras para preparar nuevas comidas en su intento por ahorrar dinero y soportar el largo año de recesión, dijo el viernes un sondeo.
La encuesta de la asociación productora de alimentos Coldiretti dijo que el 59 por ciento de los italianos estaban reutilizando la pasta, el pan y la verdura para hacer nuevos platos, una tendencia que pone de relieve cómo las medidas de austeridad y el desempleo están afectando a los bolsillos de muchas familias.
Italia desperdiciaba 10 millones de toneladas de comida cada año, con un valor estimado de 11.000 millones de euros, dijo el sondeo.
No obstante la investigación, realizada por el grupo de estadísticas SWG y titulada "El comportamiento de los italianos en tiempos de crisis", sugería que los italianos eran capaces de hacer de la necesidad virtud.
"Las recetas anti-pasta son numerosas en Italia", dijo Sergio Marini, presidente de Coldiretti, en la presentación del estudio.
"Sólo necesitas un poco de creatividad y puedes cocinar sabrosas croquetas de carne con las sobras de carne picada, huevos, pan y queso", dijo Marini.
Aunque Italia es un país de ricas tradiciones culinarias, la mayoría de ellas se basan en ingredientes humildes que se remontan al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando la comida era escasa.
La toscana "ribollita", la veneciana "pinza" o la napolitana "frittata de pasta" suenan a comidas de gourmet pero todas se basan en ingredientes reciclados como la pasta y las verduras.
El gasto del consumidor ha empezado a descender este año, tras alcanzar su máximo desde la Guerra Mundial, y los datos del ISTAT muestran que la confianza del consumidor sólo se ha recuperado un poco desde el mínimo alcanzado en junio, dijo el mes pasado el grupo de presión del comercio al por menor Confcommercio.
Coldiretti dijo que una de cada cuatro familias italianas pasaba por una difícil situación económica, un tres por ciento más que el pasado año.
Una subida prevista de un punto porcentual en el IVA, que debería entrar en vigor el próximo julio, podría costar a las familias más de 500 millones de euros en precios más altos, dijo Coldiretti.
/Por Antonella Ciancio/