NUEVA YORK/HELSINKI (Reuters) - Las acciones de Nokia se desplomaron el miércoles un 13 por ciento después de que sus nuevos teléfonos avanzados Lumia no lograran impresionar a los inversores, que esperaban dispositivos innovadores que rescataran a la compañía finlandesa.
Nokia y su socio Microsoft presentaron el Lumia 920, el que puede ser su último intento para recuperar la cuota de mercado perdida en favor de rivales como Apple, Samsung y Google.
Microsoft y Nokia esperan que el nuevo Lumia -de colores brillantes, con una pantalla más grande y tecnología que reduce lo borroso y la inestabilidad en fotografías y vídeos- se convierta en un potente arma en medio de una guerra en la industria de telefonía móvil que se intensifica cada vez más.
Pero los inversores dijeron que carece de "asombro" y rápidamente lo rechazaron. Algunos analistas dijeron que la reticencia de Nokia a entregar fechas, precios o socios de servicio telefónico tampoco fue de mucha ayuda.
Las acciones de Nokia que operan en Helsinki comenzaron a caer a mediodía después del lanzamiento en Nueva York y cerraron con una baja de un 13 por ciento a 1,99 euros, su mayor desplome en un solo día desde junio.
Las acciones de Nokia que operan en Estados Unidos cerraron con un descenso cercano a un 16 por ciento a 2,38 dólares. El papel había ganado un 67 por ciento desde mediados de julio a medida que aumentaba la expectativa por conocer el nuevo Lumia.
El Lumia fue el primero de una serie de lanzamientos de teléfonos móviles previstos antes de la temporada de ventas de fin de año.
Motorola Mobility, de Google, lanzó tres nuevos 'smartphones' con software Android en la tarde del miércoles y Verizon Wireless, el mayor proveedor de telefonía móvil de Estados Unidos, se comprometió a venderlos.
Amazon.com presentará sus nuevas tablets Kindle Fire un día después y Apple tiene previsto dar a conocer la última versión del iPhone el 12 de septiembre.
Por su parte, Samsung Electronics dice que venderá su propio teléfono con Windows a partir del próximo mes.
"El desafío es que el mundo está trabajando en la cuarta, quinta o sexta edición de sus teléfonos, mientras que Nokia aún intenta completar el capítulo 1. Aún tiene mucho por avanzar", dijo Mark Sue, analista de RBC.
"La gente estaba buscando algo asombroso. La mayoría de los inversores lo verá como una evolución, no una revolución. Nokia ha logrado buenos avances, pero los inversores estaban buscando saltos cuánticos. No vimos eso", agregó.
El Lumia 920 y el Lumia 820, más pequeño, incluyen el último software operativo Windows Phone, el cual Microsoft espera se convierta en la tercera plataforma de teléfonos móviles junto a sus rivales iOS, de Apple, y Android, de Google.
Si los nuevos teléfonos no seducen a los consumidores podrían significar el final para la deficitaria Nokia y un duro golpe a los intentos de Microsoft de recuperar su peso en el mercado.
El Lumia 920, que fue calificado el miércoles por ejecutivos como el nuevo teléfono insignia de Windows, tiene una tecnología de cámara para reducir la borrosidad que produce el movimiento de manos y capacidad de carga inalámbrica, entre otras novedades.
El nuevo software telefónico es similar al escritorio de Windows 8 y al software de tablet que será lanzado el 26 de octubre, lo que facilita a programadores extender las aplicaciones y permite a Microsoft esperar que eso aumente la popularidad de la plataforma.
De todos modos, el sistema operativo Windows no es universalmente popular en el mercado informático, por lo que los consumidores no necesariamente se acercarán a su equivalente telefónico por pura voluntad.
No obstante, los nuevos Lumia pueden beneficiarse de continuas caídas de la BlackBerry de Research In Motion, y también de un reciente revés legal sufrido por el sistema operativo Android.
Las apuestas de Nokia y Microsoft son altas.
El fabricante finlandés ha registrado más de 3.000 millones de euros (3.800 millones de dólares) en pérdidas operativas en los últimos 18 meses, lo que lo obligó a recortar 10.000 puestos de trabajo y a proseguir con la venta de activos.
Su cuota en el mercado mundial de teléfonos avanzados se ha reducido a menos del 10 por ciento frente al 50 por ciento del que llegó a disfrutar, antes del lanzamiento del iPhone en 2007.
Los teléfonos Windows solo han capturado un 3,7 por ciento del mercado mundial de 'smartphones', según Strategy Analytics. Los móviles con Android tienen el 68 por ciento, mientras Apple representa el 17 por ciento.
Para Microsoft, un éxito en ventas del Lumia podría convencer a más fabricantes de teléfonos móviles y operadores de apoyar su software Windows Phone 8, que promete un rendimiento más rápido y una pantalla de inicio personalizable.
