La policía alemana saca a un DJ del piso de una "maníaca sexual"

BERLÍN (Reuters) - Un pinchadiscos de Múnich que fue retenido durante cinco horas para satisfacer sexualmente a una alemana de 47 años ha anunciado que presentará cargos por coerción sexual y privación de libertad contra la mujer, a la que había conocido unas horas antes en un pub.

El pinchadiscos de 43 años, llamado Dieter S., dijo al periódico muniqués T.Z. que había llamado a la policía para que le rescatara del piso de la mujer en Múnich después de que ella le encerrara, escondiera la llave y le obligara a tener sexo con ella reiteradamente.

"Era una maníaca sexual y no había forma de escapar del piso", afirmó Dieter. Según contó al diario, que ya había publicado un informe policial sobre el incidente, había tenido sexo consentido con la mujer tres veces anteriormente ese mismo lunes de Pascua.

"Me estaba tomando una cerveza en el pub después de trabajar cuando conocí a esta mujer, e hicimos buenas migas", dijo Dieter, en referencia a su encuentro en un pub del distrito Ludwigsvorstadt de Múnich. "Era bastante atractiva", añadió.

Pero tras los primeros intercambios consentidos, Dieter dijo que quería irse. Descubrió que ella había bloqueado las puertas por dentro y escondido la llave, así que no se podía ir. Pensó en intentar saltar por el balcón, pero estaba muy alto, según afirmó.

"Me di cuenta de que estaba atrapado y tendría que seguir hasta que ella se durmiera", dijo Dieter. "Así que lo hicimos otras cinco veces".

Tan pronto como la mujer se durmió, Dieter dijo que salió al balcón e hizo una llamada de emergencia a la policía desde su teléfono móvil. La policía llegó diez minutos más tarde.

La mujer abrió la puerta para permitir la entrada los agentes. Entonces empezó a insinuarse a los oficiales, según la policía.

"Intentó persuadir a los policías para que se unieran a ella en 'actividades afines'... aunque sin éxito", escribió la policía de Múnich en una nota de prensa.

La mujer fue detenida y posteriormente liberada. Ahora se enfrenta a cargos por coerción sexual y privación de libertad.